[ CULTURETA ]
ducir algo de la nada”, “establecer,
fundar, introducir por vez primera
algo; hacerlo nacer o darle vida”.
“La maternidad
me llevó a
despertar
una faceta
más natural y
salvaje”
DO: Por mucho que nos alerten
de los cambios que supone la ma-
ternidad, ¿estamos “preparadas”
para la avalancha emocional y fí-
sica que se nos viene encima?
GO: Deberíamos estar preparadas,
conectadas y fuertes para este
proceso transformador que vivi-
mos. Sin embargo, la preparación
o educación prenatal siempre se
ha abordado desde el punto de vista biomédico, sin
prestar real importancia a aspectos emocionales, so-
ciales y de género. Si nos preparáramos siendo más
conscientes de los cambios que conlleva, entraríamos
a esta etapa de ser madres menos infantilizadas, mu-
cho más conectadas y probablemente más empode-
radas. Tendríamos más recursos para enfrentarnos a
esta revolución emocional que supone la maternidad.
DO: ¿Le damos socialmente la importancia que real-
mente tiene la maternidad y la crianza?
GO: Pienso que en esta sociedad patriarcal en la que
vivimos, la maternidad, por ser parte de lo femenino,
está situada en la sombra, relegada a lo privado y fue-
ra de lo público. Me atrevería a decir que, incluso, está
excluida de los discursos feministas más relevantes de
la sociedad actual, quizás por miedo a anclar a la mu-
jer sólo a su capacidad reproductiva y a la crianza de
sus hijos, cualidad que, desde mi punto de vista, apor-
ta un valor infinito a lo femenino. Esta cualidad, siem-
pre pensada, por supuesto, como una opción, nunca
como un destino. A mi modo de ver, la maternidad y la
crianza es una herramienta poderosa para la creación
de una sociedad futura más igualitaria, más libre y por
supuesto, más feliz. Entonces, ¿por qué no otorgarle el
espacio de poder que se merece?.
digerir públicamente, así que pen-
sé que necesitaba un nombre que
le diera un aire de optimismo.
No quería un pseudónimo pen-
sado desde el humor o el sarcas-
mo, solo necesitaba un nombre
fresco que permitiera al proyecto
un espacio cómodo y sincero para
expresarme en libertad, donde tu-
vieran cabida todos los sentimien-
tos con los que el huracán de la
maternidad nos inunda.
DO: ¿Te planteas seguir en esta línea de trabajo?
GO: Sí, me parece que queda mucho por hacer, que
necesitamos visibilizar la maternidad y la crianza y
ofrecerles el espacio de poder que se merecen.
Por otra parte, quiero empezar a investigar sobre
la paternidad. Siento la necesidad de saber cómo se
sienten los padres, cómo viven el vínculo con su hijo
o con su hija, cómo sienten a la sociedad que los ha
creado con respecto a su posición de crianza, si sien-
ten miedo y culpa o solo presión económica con la
llegada de la paternidad y, con todo esto, ser capaz
de visibilizar diferencias o distanciamientos entre la
maternidad y la paternidad con el fin de que podamos
diluirlos y conseguir un espacio familiar propicio para
una crianza de calidad tan necesaria para crear seres
libres y felices. ■
DO: Has adoptado el pseudónimo de Mamá Confetti.
¿Por qué esta elección? ¿Qué significa para ti este
pseudónimo?
GO: Mamá Confetti me parecía sonoro, y divertido,
además le ofrecía frescura. El hecho de que este
proyecto hubiera nacido con la premisa de des-
pojar a la maternidad de ta-
búes y otorgarle un halo de
verdad y honestidad, con
todas sus consecuencias,
lo hacía de alguna mane-
ra más duro o difícil de
ENERO 2019 •
mama
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