[ BLOGUEROS EXPATRIADOS ]
P: Has mencionado alguna vez lo mucho que te
sorprendió el trato hacia los niños. ¿Dirías que es en
general un país kids friendly?
R: Por lo general se podría decir que sí, en el sentido
de que se tiene mucho en cuenta a los niños. En casi
cualquier sitio donde vayas a tener que esperar vas a
encontrar un espacio para los niños. Como mínimo una
cajita con libros y juguetes. Por ejemplo: en el banco,
médicos, hospitales, administraciones públi-
cas, farmacias, dentistas…
En las ciudades hay un gran núme-
ro de parques de juegos para los
niños, todos ellos naturales con
arena, plantas y césped. Algunos
realmente amplios. Y, además,
suelen estar bastante limpios,
hasta el punto de que es habitual
que haya niños que vayan descal-
zos. También hay algunos lugares
para comer con zona de juegos.
Y la gente, en general, es muy
agradable con los niños. Cuando
mis hijos hacen “cosas de niños”,
no es habitual ver malas caras. Al
contrario, recibimos normalmente
comprensión y sonrisas.
Para mí fue un punto clave en mi proceso todo el apo-
yo que recibí, con todas ellas animándome y diciéndo-
me que podría conseguirlo, que no tenía porqué acabar
de nuevo en cesárea. Muy diferente de mi experiencia
con el mayor, o de las historias que por desgracia oigo
•
mama
• ENERO 2019
P: En cuanto a la conciliación familiar y laboral, ¿qué
retos ha supuesto para ti hasta el momento
el expatrio?
R: La verdad es que en cuanto a con-
ciliación creo que lo tienen bastante
bien montado. Para empezar, los
padres pueden repartirse 14 me-
ses para estar con el bebé, entre
la baja de maternidad y el perio-
do de excedencia pagada, más
luego hasta tres años de exce-
dencia no pagada. Y luego por la
posibilidad de coger días cuando
los niños están enfermos, más días
de vacaciones, y mucha flexibilidad
de horarios en la mayor parte de los
trabajos.
“Los procesos
de embarazo
y parto están
mucho más
humanizados y
se respeta más
a las madres”
P: Fuiste madre por segunda vez
allí, y has contado en tu blog que
conseguiste un PVDC. ¿Cómo se
vive el embarazo y el parto en
Alemania?
R: Fue toda una experiencia. Todos
los profesionales que me encontré
en el camino estaban bastante bien
formados, eran muy profesionales
y muy empáticos. Desde las ginecólogas a las enferme-
ras o las matronas – que, por cierto, tienen muchísima
relevancia en todo el proceso–.
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aún demasiado a menudo en España, de profesionales
que sueltan cada perla… Tanto por curiosidad e interés
propios, como con la idea de documentarlo todo, me
informé de todas las posibilidades. Los procesos de
embarazo y parto están mucho más humanizados y se
respeta más a las madres.
Todo el mundo asume que lo nor-
mal es que los niños vayan a la guar-
dería cuanto más tarde mejor. Esto
tiene sus ventajas e inconvenientes,
claro. Por un lado porque las madres
que deciden volver a trabajar antes
y dejan a su bebé al cargo de otras
personas no están bien vistas. Y por
otro por la dificultad de conseguir
plaza de guardería en la mayor parte
del país, y cuanto más pequeños los
niños más complicado.
Un punto pendiente de mejorar sería la reincorpora-
ción de las madres que trabajan por cuenta ajena tras
pasar varios años desconectadas, ya que son las que
suelen coger el periodo de maternidad o la mayor parte
del mismo. No es fácil.
A mí me ha sido posible conciliar de una forma muy
distinta a lo que hubiera ocurrido estando en España.
De hecho, con mi hijo mayor no pude. Al haber empe-