[ SANA-MENTE ]
problemas que surgen en relación a
la parentalidad de sus hijos”.
Su principal función, según Ra-
moneda, sería “asistir a los proge-
nitores que están anclados en con-
flictos postdivorcio o separación a
implementar su Plan de Parentali-
dad y a minimizar el conflicto fa-
miliar, protegiendo a los hijos del
impacto derivado de su falta de ha-
bilidades, escasa motivación para
tomar decisiones por sí mismos,
o dificultad de cooperación en los
acuerdos adquiridos”. Hablamos
de un profesional que “no realiza
terapia familiar, sino que media o
asesora legalmente”, por lo que,
explica la psicóloga, “debe dispo-
ner de un amplio conocimiento y
experiencia en aspectos clínicos y
del desarrollo infanto-juvenil, éti-
cos, de género y violencia intrafa-
miliar, estando además familiariza-
do con la terminología legal”.
Entre sus labores, además, esta-
ría el educar a los padres “sobre
temas de comunicación, gestión
de conflictos, etapas evolutivas,
impacto del divorcio y del conflic-
to parental en los hijos”; recomen-
CÓMO ACCEDER A UN COORDINADOR DE PARENTALIDAD
Según Marisol Ramoneda, existen dos opciones para que unos padres
que se hayan inmersos en un proceso de divorcio o ya se hayan separado,
accedan a la figura del coordinador de parentalidad. Por un lado, que los
progenitores “lo contraten de forma privada para ponerse de acuerdo so-
bre las decisiones que hagan referencia a los hijos. Sería entonces como
un mediador especializado”. Por otro, que uno de los dos abogados o los
dos lo soliciten al juez y sea éste el que, “o bien lo designe (para lo que
aún no tienen listados), o bien llame al colegio oficial de psicólogos (o de
otras profesiones como trabajadores sociales o abogados, por ejemplo,)
para que de forma aleatoria le asignen uno”.
En ese sentido, Ramoneda afirma que la profesión de coordinador de
parentalidad existe por ahora “a nivel privado”, pero en su opinión con-
sidera que cuando es el juez el que lo nombra o pide su selección a un
colegio profesional, “esa persona en su actuación se podría considerar
como pública, porque uno de los requisitos cuando lo nombra un juez es
que haga un informe de la evolución de la familia en cuestión”.
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mama
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dar como implementar algunos
de los elementos del Plan de Pa-
rentalidad, como pueden ser los
cambios en los horarios parenta-
les, la planificación de las vaca-
ciones o la logística en los inter-
cambios entre una casa y la otra;
proponer maneras de redistribuir
el tiempo que los hijos pasan con
los padres para reducir la conflic-
tividad; gestionar y promover la
comunicación entre los progeni-
tores; coordinar, si es necesario, la
actuación de los diversos profe-
sionales y sistemas involucrados,
como la educación o la sanidad; y
decidir sobre algunas cuestiones
que hayan sido recogidas en el
acuerdo firmado.
Pensar en los hijos
“Normalmente en las situacio-
nes postruptura complicadas, los
padres se centran en sus intereses
olvidando a menudo los de sus hi-
jos”, asegura Marisol Ramoneda,
que no duda en afirmar que es-
tos conflictos parentales “afectan