Madresfera Magazine 10- Mayo 2017 | Page 28

VOLVER A ATRÁS PARA COMPRENDER EL HOY El origen del “desastre” lo encuen- tra José María Paricio, pediatra, fundador de e-lactancia.org y Te- lasmos.org y presidente de la Aso- ciación para la Promoción e Inves- tigación científica y cultural de la Lactancia Materna (APILAM), en los inicios del siglo XX, un momen- to en el que las compañías de le- che artificial comenzaron a entrar tímidamente en nuestro país, con años de retraso respecto a otros países europeos como Francia o Inglaterra. Tendrían que pasar casi 50 años desde aquellos inicios para que el despegue económico, junto con el traslado del parto del hogar al hospital, disparara la po- pularidad de las leches artificiales, que vivirían su apogeo en los años 70 y 80. Se abría así, un enorme hueco generacional entre las ma- dres que abandonaron sus lactan- cias o decidieron no dar el pecho “porque la presión que había era enorme”. Menciona Paricio el traslado que se produce del proceso de parto al hospital porque será éste el escena- rio en el que se empezarán a dar “pautas y recomendaciones abe- rrantes” en cuanto a lactancia ma- terna (pecho cada tres horas, cinco 28 • mama • MAYO 2017 minutos de cada pecho, echarse crema si duele...). Recomendacio- nes erróneas de “grandes profeso- res y profesoras” y la consecuente pérdida de la confianza de las ma- dres generada por el desprestigio de la maternidad. “Desde la oficiali- dad de la pediatría española del si- glo pasado se comenzó a decir a las mujeres que no tenían ni idea de lo que estaban haciendo a través de mensajes como “si te descuidas y no haces lo que te estoy diciendo, eres un peligro para tu hijo”. De he- cho, escriben unos tratados total- mente aberrantes de lactancia ma- terna, de puericultura (que se pueden incluso conseguir hoy en li- brerías de segunda mano); tan abe- rrantes que lo normal es que con esas recomendaciones las lactan- cias fracasasen al cuarto día”, expli- ca el presidente de APILAM, que nos recuerda que “si algo habían he- cho las mujeres bien durante siglos y milenios eso era dar pecho”, y lo hacían con las mejores maestras: otras madres. Porque “la lactancia no es un instinto, es un aprendizaje, “La lactancia no es un instinto, es un aprendizaje, un hecho cultural transmitido de madres a hijas” un hecho cultural transmitido de madres a hijas”. Sería ya en los años 90 cuando re- nació el interés por recuperar la cul- tura de lactancia materna a través de “pequeños grupos de madres” que comienzan a darle valor de nue- vo. Cuando le preguntamos por el futuro, José María Paricio es opti- mista: “De allí hasta aquí hemos pro- gresado mucho. Sigue habiendo mucho por hacer, y en la actualidad seguimos siendo una cultura muy hostil a la lactancia materna, pero hemos avanzado mucho; y lo hemos hecho gracias, sobre todo, a que existen grupos de apoyo a la lactan- cia, grupos de mujeres que se orga- nizan en torno a la crianza y a la lac- tancia y que son para mí una garantía para que se recupere la cul- tura de la lactancia”. UNA CUESTIÓN CULTURAL Para explicar la cuestión de la hosti- lidad cultural hacia la lactancia que menciona José María Paricio, Marta Ausona, antropóloga y cofundadora del grupo de investigación MA- TER-Observatori de les maternitats i paternitats contemporànies, en- cuentra muchos condicionantes so- ciales. Por un lado, la gran influencia que ha tenido la leche artificial du- rante las décadas de los 50 a los 80, que mencionaba Paricio. “El biberón se asoció con una imagen de inde- pendencia y modernidad de la mu- jer, sobre todo porque en la época franquista se implementó mucho el dar el pecho como forma de sacrifi- cio y amor maternal, aunque doliera, y si dolía mejor, porque más buena