[ BLOGUEROS EXPATRIADOS ]
Gordon Road
Girls School.
mi marido (y sin niñas), o me iba de cena con mis
amigas. El cambio en nuestro estilo de vida fue muy
radical y yo pasaba gran parte del tiempo sola y sin
hablar con nadie. La verdad es que a los cuatro nos
costó adaptarnos al principio, pero mi marido y mis
hijas lo llevaron mucho mejor que yo.
MM: No es habitual, con hijas ya de seis y tres años,
que una familia decida recorrer medio mundo (de Se-
villa a Durban) y cambiar su lugar de residencia. ¿Qué
os llevo a Sudáfrica?
DG: La crisis. Mi marido, como muchos arquitectos,
no estaba pasando por un buen momento. Inten-
tó buscar trabajo en España, pero la situación era
complicada. Sin pensarlo dos veces, contactamos con
un buen amigo que llevaba unos años trabajando en
Sudáfrica y justo en ese momento necesitaban a gen-
te, preparamos el papeleo, hicimos nuestras cuatro
maletas y nos fuimos a Durban.
MM: Pasasteis en Sudáfrica tres años y hablas en tu
blog de una experiencia maravillosa, pero al mismo
tiempo dura. Supongo que el choque cultural es muy
fuerte, ¿no?
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•
mama
• MARZO 2 0 1 7
“Es cierto que las redes
sociales son una gran
ayuda cuando una está
expatriada, pero no es
suficiente”
DG: Durban tiene una diversidad cultural fantástica,
me encantó conocer a sudafricanos afrikaners, zulúes,
o musulmanes. Todos nos invitaban a barbacoas y
cumpleaños, nos abrían las puertas de sus casas, y
nos presentaban a su familia. Eso, unido a las precio-
sas playas, los increíbles paisajes y los espectaculares
safaris, hicieron que fuera una experiencia maravillo-
sa. Al mismo tiempo fue dura por la soledad y por la
inseguridad con la que se vive en ese país por el alto
índice de delincuencia.
MM: ¿Qué es lo mejor que te ha dejado estos tres
años? ¿Y lo más duro?
DG: Lo mejor, aparte de la gran experiencia cultural,