Madresfera Magazine 09- Marzo 2017 | Page 36

mo tiempo somos la primera generación que tiene conciencia real de los efectos del cambio climático, de la pérdida brutal de biodiversidad que todo esto ha traído en tan poco tiempo, de la destrucción de eco- sistemas. Inevitablemente, vivimos una época de con- tradicciones. Por eso es tan importante que tomemos conciencia, continuemos aprendiendo, corrijamos lo que haga falta en nuestro día a día y eduquemos bien a nuestros hijos. que también usan de forma colectiva. Algo que les enseña el valor de compartir por encima del deseo de posesión. Otra cosa bonita es que hace unos años comenzaron a utilizar productos ecológicos en el comedor y aprovecharon este avance para hacer partícipes a los niños y explicarles todas las implica- ciones de esta transición. ¿Qué crees que podemos hacer como padres para fomentar un consumo mucho más razonable desde casa? ¿Por dónde podemos empezar? Por dar el mejor ejemplo. Y si empezamos desde la cuna, mejor que mejor. Sin embargo, como los adultos también estamos en constante aprendizaje, no hay que tener miedo de introducir cambios en el hogar. Bien explicados y fundamentados, eso sí, para que los niños entiendan las razones por las que tomamos esas decisiones y, con suerte, también las hagan suyas. A veces... ¿falta en general cohe- rencia entre mensaje y los hábitos de consumo de la familia? Es muy habitual y creo que en parte es normal porque nos hemos visto en la necesidad de reaprender demasia- das cosas. Somos la generación de los desechables, del consumo desmedi- do, del fast food, fast fashion y el low cost. Vivimos en una sociedad de la abundancia, independientemente de nuestro nivel económico. Pero al mis- 36 • mama • MARZO 2017 Sobre el entorno familiar y social... ¿es posible trasladar esta toma de conciencia acerca del consumo sostenible a otros sin que le resten importancia o se sientan atacados? De nuevo, creo que lo importante es dar el mejor ejemplo, sin caer en juicios ni calificaciones al otro. Estar abiertos a explicar por qué hacemos lo que hacemos, y comprender que cada quien vive su propio proceso y a su propio ritmo. Creo que por eso yo he apostado por bloguear y por pasar al activismo. Porque finalmente, tu mensaje sólo lo escuchará aquel que esté preparado para hacerlo. Y el blog y el activismo me han permitido poner la información al alcance de más personas, sin necesidad de dar discursos moralizantes en una cena familiar, cosa que puede ser una pesadilla para todos cuando el otro no está por la labor de escucharlos. Por último, ¿nos podrías dar algunos consejos para un hogar realmente más sostenible? Hablemos de algunas “erres” importantes: Reflexionar sobre todo lo que consumimos. Rechazar todo lo que no necesitamos. Reducir al mínimo el consumo -ya sean zapatos o agua-. Reparar siempre que sea posible. Reutilizar -dando nueva vida con el upcycling, compar- tiendo con otros lo que ya no us- amos, comprando de segunda mano. Reciclar todo aquello que nos quede después de aplicar to- das las R anteriores (ya sea plásti- co, residuos orgánicos, vidrio o tejidos). Y un bonus track: Recla- mar. Hacer oír nuestra voz y exi- gir cambios, responsabilidades, hacer un poco de activismo, que nos hace falta para multiplicar el impacto positivo de nuestros gestos individuales. ■ “Somos la primera generación que tiene conciencia real de los efectos del cambio climático”