Madresfera Magazine 08- Enero 2017 | Page 74

[ CULTURETA ]
dres viven su experiencia : como algo “ de mujeres ” que no interesa al público en general , como algo natural , instintivo e incompatible por lo tanto con la escritura ; como algo opuesto , antitético , a la creación de obras del espíritu ; como algo desvalorizado , asociado a la baja cultura , a la publicidad , los libros de autoayuda ...”.
El tópico de la madre feliz “ Si dejamos que la maternidad la cuenten otros , nos exponemos a que se idealice , a que no sea real ”, afirma Silvia Allende , que hace referencia a las madres que encontramos en la literatura tradicional , las madres de los hombres , las madres de Lorca , de Galdós , ‘ La madre ’ de Gorki , ‘ La historia de mi madre ’ de Albert Cohen , el ‘ A mi madre . In memoriam ’, de Ford ... “ Todas estas madres literarias son personajes llenos de tópicos y abstracciones , alejados de la realidad ”, añade . Para Laura Freixas , se trata de una “ visión idealizada , súper exigente , y además estándar , de lo que es una madre que nos castiga y nos hace vivir la maternidad con una culpa perpetua ”.
Para la escritora barcelonesa , autora entre otros de ‘ El silencio de las madres ’, en la literatura faltan modelos de madres humanas , reales : “ toda literatura parte de una literatura previa , de unas convenciones , pero en el caso de la madre , lo único que tenemos son dos imágenes esquemáticas , muy pobres , estereotipadas : la madre angelical y la madre diabólica ”. En el mismo sentido se pronuncia Cira Crespo , que señala que la ausencia de literatura escrita por mujeres , por madres , el hecho de no narrar las experiencias en primera persona , hace que se hable de la maternidad “ desde la distancia ” y , en el peor de los casos , “ desde el tópico ”, a través del cual se acaba creando “ un imaginario superficial y mitológico ”, el de la buena madre .
“ El tópico de la madre abnegada y feliz es tan poderoso que es muy difícil luchar contra él , se vería como una traición ( a las propias hijas e hijos , para empezar ) un testimonio que mostrase que una madre no es forzosamente feliz , ni tiene ganas de sacrificarse ”, añade Freixas , que no duda en comparar esta situación con lo que sucede en el caso de los hombres : “ la “ mala madre ” es un espantapájaros muy presente , mientras que el hombre que descuida a sus hijos ( un fenómeno mucho más frecuente que a la inversa ) no es tildado de mal padre ”. A ese respecto , Cira Crespo señala al personaje de Don Draper , el protagonista de la premiada serie televisiva ‘ Mad Men ’: “ Él es lo que podríamos llamar un “ mal padre ” pero lo entendemos , empatizamos con sus imperfecciones , hasta nos ponemos en su lugar . Eso se debe , creo , a que detrás del personaje hay un narrador que se siente identificado . Me parece que es difícil encontrar personajes femeninos de este calibre , es decir , con matices , contradicciones y maldades , pero que por detrás de todo eso , son personas con las que se puede empatizar , ya no solo otra mujer , sino otro hombre ”.
Recuperando el relato Poco a poco , “ muy despacio ” según Laura Freixas , el relato de las mujeres va ganando espacio en la literatura , también sus vivencias maternales , tan iguales y tan distintas unas a otras . “ Las mujeres en este último siglo hemos accedido al pensamiento , a las universidades , a la creación , en la misma medida prácticamente que los hombres . La cantidad de textos donde intentamos reflejar nuestra realidad se ha multiplicado ”, explica Cira Crespo , que afirma que no se puede obviar el “ impacto tremendo de las redes sociales ”, donde las mujeres están continuamente narrándose , contándose .
Este boom de los blogs y las redes sociales , de las narraciones en torno a las diferentes maternidades , lo observa Silvia Allende “ con ilusión , pero también con pena ”, ya que sigue habiendo pocas mujeres “ que se atreven a cuestionar de verdad los tópicos , a criticar , atrevan a romper con el discurso normativo en torno a lo que significa ser madre ”.
Lo que sí encuentra la psicóloga es mucha frivolidad , ironía , humor , aspectos que considera necesarios , “ pero no suficientes porque nos dejan en la superficie . Se ha popularizado el discurso , pero no sé hasta qué punto se siguen reforzando los prejuicios sobre lo que es ser una buena madre o una mala madre ”.
Allende considera que hoy en día hay ya hay “ un sobrerregistro ( propiciado por Internet ) de la experiencia maternal en sus primerios estadios ”, aunque ella echa de menos los relatos de “ madres de adolescentes , madres mayores decepcionadas o disgustadas con lo que se han ido convirtiendo los hijos al
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