[ PROYECTOS BLOGUEROS ]
no hay excusas para comprar
libros en vez de chucherías?
“¡Ni una sola!”, asegura.
Otra particularidad de estos pequeños libros es que,
además de en castellano, se
pueden adquirir en euskera
y catalán. “Una de mis lenguas maternas es el catalán y
una de las lenguas maternas
de mi niña es el euskera (y el
castellano y el alemán). A las
lenguas hay que amarlas y
abrazarlas. Cuantas más, mejor”, asegura Gessamí.
“Lo mejor de ser
autónomo es
tener libertad
para poder
rectificar los
pasos que has
dado y rediseñar
los siguientes.”
En el manifiesto de la editorial,
su fundadora ya nos dice que
tiene muy claro su objetivo: “Hacer feliz a la gente”.
Y por el feedback que recibe, cree que lo está consiguiendo: “Los libros parten de unas historias que
se cuecen en las mentes de los autores, que se aderezan con los maravillosos dibujos de los ilustradores, que mezclo con un toque mágico en la cocina
de los Minis y, cuando salen del horno, vuelan hasta
los dormitorios infantiles para que unos adultos les
pongan voz. Un Mini, y cualquier libro, nace de algo muy
personal y, con suerte, llega
al corazón del lector. ¿Le ha
gustado? ¿El libro le ha hecho
vibrar aunque sea un poco?
¿Eso que sale ahí es una sonrisa? Para mí, emocionar a los
lectores con un Mini es crear
felicidad porque somos humanos y necesitamos sentir”.
Tras el éxito de la primera
hornada de seis minis lanzada
en diciembre de 2014, un año
más tarde llegó la segunda. Y la
respuesta de la gente a ambos
lanzamientos fue para Gessamí
“muy positiva”. “Muchas de las
personas que habían comprado los primeros, han
comprado los segundos, y gente que se acerca por
primera vez a la web, compra los primeros y, luego,
repite con los segundos. Es muy bonito”.
¿Podemos entonces esperar una tercera colección?
“En diciembre habrá una tercera. ¡Tenemos Minis para
mucho rato!”. ■
MAYO 2016 •
mama
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