LUMEN Edicion 1, agosto 2014 | Page 113

LUMEN Edición #1 • Agosto 2014 • Página 97 También consideramos que, en ambos casos, dichas interpretaciones no sido han hechas de mala fe, sino que se han colado en sus trabajos debido al exceso de amor por sus respectivas creencias, que no les ha dejado ver objetivamente los asuntos estudiados. El resultado ha sido, en ambos casos, la presentación errónea o incompleta de determinados hechos históricos, o de sus interpretaciones. Algunos historiadores profesionales españoles, también han emitido duros juicios con respecto al trabajo de ciertos autores masones que han denominado masonólogos, y que, sin embargo, necesitan para encontrar mucha de la información que utilizan en los propios. Con respecto al segundo asunto, la participación de la masonería en política, hemos visto cómo los hechos y los métodos estadísticos apoyan la tesis de que tal contribución existió, y consistió en la formación de muchos líderes de estos movimientos político-sociales, así como en la divulgación de las ideas que éstos desarrollaron. Esta aportación se llevó a cabo a través de tres funciones claves que desarrolla la masonería y que son: conectiva, diseminadora e incubadora. La masonería actúa como un catalizador en los procesos políticos y sociales. Por último no deben tomarse nuestros comentarios como una crítica hacia España. Ni los puertorriqueños ni los cubanos somos anti-españoles. Puerto Rico fue la segunda patria de Pablo Casals, cuando salió al exilio por la dictadura franquista. Una de las arterias más importantes de San Juan/Santurce, lleva el nombre del Hno. Manuel Fernández Juncos, asturiano, masón de una Obediencia española, que emigró de niño a Puerto Rico, y cuyas muchas y muy valiosas contribuciones a la política y la cultura de la isla aún se recuerdan y se reconocen81. Cuba recibió, después de su independencia, tantos o más españoles82 cómo durante el Siglo XIX. Los cubanos no guardan rencor hacia España83, a pesar de la Reconcentración84 del 81 España debe, al Capitán Federico de Capdevila, que salvo el honor español en Cuba al defender a los estudiantes de medicina, fusilados en La Habana el 27 de noviembre de 1871 por el delito de profanar la tumba del periodista español Gonzalo Castañón, un monumento en el Paseo de la Castellana de Madrid. 82 Cuba es el único lugar del mundo donde un catalán o un vasco acepta que se le llame gallego, como cariñosamente llamamos los cubanos a todos los peninsulares. 83 El Manifiesto de Monte Cristi, redactado por Martí y Gòmez, dice: “en el pecho antillano no hay odio; y el cubano saluda en la muerte al [bravo] español a quien la crueldad del ejercicio forzoso arrancó de su [hogar] casa y su terruño para venir a asesinar en pechos de hombre la libertad que él mismo ansía”. Martí: Obras Completas, Tomo 4, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana 1975, páginas 93-101. 84 El programa de Reconcentración del General Weyler consistía en desalojar de sus fincas a todos los guajiros (jibaros), pues supuestamente ayudaban a los mambises, y concentrarlos en las ciudades. La pérdida de las cosechas, provoco una hambruna generalizada, que unida a las enfermedades provocadas por las pésimas condiciones de salubridad diezmaron la población civil. Las fuentes más conservadoras establecen los muertos en más de 300.000. Maso, Calixto. Historia de Cuba. Ediciones Universal, Miami. 1998