vamos a tomar el escenario y nosotros si que vamos a
hacer vanguardia”. Así pasó, nos subimos y empezamos
a improvisar, después se subieron Los Blops, algunos
amigos, y pasó algo bien especial. La gente estaba fascinada, bailaban y todo. Estuvimos más de veinte minutos,
y hacia el final el Gato empieza a hablar en el micrófono
sobre la vanguardia, a burlarse un poco del evento y de
la idea de la organización.
Es de aquí en adelante que el Gato toma el rol de voz
principal. Y teníamos una preocupación más por el show
que por la estética. Toda esa fue una época de descubrimientos intuitivos. En l