Literatura BDSM El Límite del Placer ( Eve Berlín ) | Page 179

—Sí. Contigo lo soy. Él se estaba volviendo a poner duro dentro de ella y su polla empezaba a agitarse. Y ella estaba preparada. Su cuerpo siempre estaba listo para él. Su cabeza y su corazón eran otra historia. Una cuyo final ignoraba. Ojalá pudiera crear su propio final. Elegirlo, tal y como hacía cuando escribía. Pero ni siquiera sabía dónde quería que terminara. No estaba segura de que quisiera que todo aquello acabara. Sí, tendría que dejar de pensar en todo eso si no quería volverse loca. Estaba bastante segura de que había perdido la cabeza desde que había conocido a Alec. Sencillamente, tenía que asegurarse de que no perdiera el corazón. Dylan dio un puntapié a la puerta principal de su piso para cerrarla y dejó caer el bolso en el suelo, cogiendo el móvil justo a tiempo. —¿Hola? —Eh. Llevo todo el fin de semana llamándote. —Todavía es fin de semana, Mischa. —Son las nueve de la noche del domingo. —El tono de voz de su amiga denotaba malhumor. —¿Y? —preguntó Dylan, mientras se quitaba el abrigo y lo colgaba en el armario ropero lacado, alto y elegante que había junto a la puerta. —Y… Supongo que no estoy acostumbrada a no tenerte disponible para mí. —Estaba con Alec. —Ya lo suponía. Dylan se agachó, se quitó los tacones altos, dejando los pies descalzos. El parqué estaba suave y frío. Encendió la calefacción mientras cruzaba el piso, entró en la cocina y se sirvió una copa de Cabernet. Se sentía bien. Perezosa. Saciada. Casi. Parecía que nunca se cansaba de él. «Alec…» —¿Dylan? —¿Qué? Lo siento, Mischa. —Te acabo de preguntar cómo te ha ido el fin de semana. Dios, realmente,