obligaciones? Quien mira a las personas con Galilea vivan como huérfanos; bendice a los
compasión se pregunta: ¿quién está necesitado de enfermos y enfermas para que no se sientan
que yo me acerque y me haga su prójimo? rechazados por Dios al no poder recibir la
Cuando el discípulo de Jesús vive desde la bendición de los sacerdotes en el templo; toca la
compasión de Dios se acerca a todo ser humano piel a los leprosos para que nadie los excluya de la
que sufre, cualquiera que sea su raza, su pueblo o convivencia; cura rompiendo el sábado para que
ideología. No se pregunta a quién debo amar sino todos sepan que ni la ley más sagrada está por
quién me necesita cerca. Esta pregunta orienta su encima de la atención a los que sufren; acoge a los
actuación ante el sufrimiento que va encontrando indeseables y come con pecadores despreciados
en su camino. por todos porque, a la hora de practicar la
compasión, el malo y el indigno tienen tanto derecho
como el bueno y el piadoso a ser acogidos con
El samaritano de la parábola no se siente
misericordia.
obligado a cumplir un determinado código moral. Estos gestos no son convencionales. Le nacen
Sencillamente, responde a la situación del herido a Jesús de su voluntad de hacer un mundo más
inventando toda clase de gestos orientados a aliviar amable y solidario en el que las personas se ayuden
su sufrimiento y restaurar su vida. Nuestra y se cuiden mutuamente. No importa que, con
respuesta a los que sufren es siempre insuficiente frecuencia, sean gestos pequeños. El Padre tiene
e inadecuada, pero lo decisivo es romper la en cuenta hasta el vaso de agua que damos a quien
indiferencia y vivir sembrando gestos de bondad, y tiene sed. Son gestos orientados a afirmar la vida y
promoviendo respuestas al sufrimiento. la dignidad de los seres humanos. Recuerdan que
Así es Jesús, el profeta de la compasión, que
“pasó su vida entera haciendo el bien” (Hechos de
siempre es posible intervenir para sacar bien del
mal que existe en el mundo.
los Apóstoles 10,38). No tiene poder político ni
potestad religiosa. No puede resolver las
injusticias que se cometen en Galilea, pero vive Jesús concluye la parábola del buen samaritano
sembrando gestos de bondad orientados a cambiar con esta pregunta: “¿Quién de estos tres te parece
aquella sociedad. Abraza a los niños y niñas de la que fue prójimo del que cayó en manos de los
calle porque no quiere que los seres más frágiles de saboteadores?”. El escriba le responde: “El que