Las Modelos Mejor Pagadas Magazine Enero 2019 | Page 17

Almara un clásico de la fusión mexico-mediterránea que se reinventa Ubicado en una concurrida esquina de la colonia Juárez, este rincón del mediterráneo en la Ciudad de México se reinventa constantemente para traer innovación y excelencia a cada uno de sus comensales. Europa. Sin embargo, el chef decidió deleitarnos con una menú que incluía algunos de sus platillos más famosos, así como una lujosa selección de os- tiones preparados de las más diversas maneras. El reconocido chef francés Guy Santoro está al mando de una cocina en la que todas las manos están comprometi- das con la calidad y la frescura de sus ingredientes. Abrimos el apetito con una copa de mezcal de manos del capitán del res- taurante, quien presenta la variedad de mezcales oaxaqueños, poblanos y michoacanos con una pasión aplau- dible. Seguimos con un gazpacho de pepino que se acompaña muy bien del pan hecho en casa y remojado en aceite de oliva, y una crema de elote tierno, servida con el Chardonnay de la Toscana de la casa. Almara tiene una carta que va desde los ingredientes mexicanos que enamo- raron a Santoro a su llegada a nuestro país hasta los sabores con los que él mismo creció en el viejo continente. El espacio es sorprendente. Maderas cla- ras que se combinan con telas en tonos más oscuros que transportan a alguna pequeña ciudad costera del sur de Francia; un sótano que recuerda a una antigua cava subterránea y una barra que guarda el sofisticado estilo náutico de las embarcaciones mediterráneas. Lo que nos trajo a Almara en esta ocasión fue el evento gastronómico que tuvo lugar durante todo el mes de noviembre: el Festival mexi-terráneo de ostras. Una celebración a los ostiones, las almejas y los frutos del mar que son tan apreciados en todo el sur de de la fusión mexico-mediterránea y gracias a sus festivales gastronómicos propone una oferta diferente a cada una de sus visitas. Ya sea para cerrar un negocio, para una ocasión especial o simplemente para consentir el paladar, este sofisticado restaurante se presenta como una opción ideal para siempre sorprenderse. Los protagonistas de la tarde fueron los ostiones: los primeros con tocino, otros rasurados y cerrando con unos Roc- kefeller muy bien logrados. El chef de cuisine nos sorprendió con su clásico lechón confitado como plato fuerte, crujientes capas de piel que se derriten en la boca y que cubren una carne tan suave que no requiere de un cuchillo para cortarse. El postre no dejó de ser un agasajo: un gigantesco soufflé de vainilla con salsa de chocolate de sabo- res muy delicados. Almara se posiciona como un clásico PÁGINA 17 / SABORES