La Falsificación de la Realidad La Falsificación de la Realidad | Page 75

Norberto Ceresole principal lobby judío en ese país. El señor Perl, que fue presentado en sociedad como "especialista en terrorismo", con toda seriedad, sostuvo: "Hay fuertes indicios de la relación de Irán con los atentados, pero no hay pruebas concluyentes. Irán respalda a Hezbollah y usa personal diplomático para preparar y llevar adelante ataques terroristas". Luego de tal originalidad, expresó su opinión sobre Argentina: "… un país donde hay un débil control fronterizo, con policías dedicados a cometer ilícitos y donde se puede corromper gente para conseguir armas y explosivos". Y como si esto no fuera suficiente, en la Argentina también "… hay un sistema judicial relativamente débil". (De Raphael Perl a Clarín, el 7 de diciembre de 1997). Hacia finales de 1997, poco antes del comienzo de la VIII Conferencia Islámica que tuvo lugar en Teherán entre el 9 y el 11 de diciembre (25) se produce, "casualmente", una "súbita resurrección de la pista iraní". Hacía casi tres años que no se hablaba del tema. De golpe, mágicamente, todo el mundo juega al sorprendido, especialmente los funcionarios argentinos. El inefable ministro de Asuntos Exteriores, señor Guido di Tella, el famoso inventor de la "política" de las "relaciones carnales" que Argentina debe mantener con los EUA, es uno de los "sorprendidos": "Parecía que la investigación (sobre los atentados terroristas) no estaba produciendo ningún resultado, pero de golpe hay una acumulación de hechos que tiene a todos muy animados". Ni los periodistas ni los funcionarios hablan sobre la naturaleza del "golpe de suerte" que ha animado a la investigación judicial. Es lógico, porque él se llama: política norteamericana orientada a internacionalizar las hostilidades contra Irán. Una vez más, el gobierno argentino cumple al pie de la letra con sus "relaciones carnales" con los EUA. La "pista iraní" emerge de sus cenizas, como un "ave fénix" tuerta y coja, en la fangosa periferia del mundo excluido. Ante esta realidad sólo cabe reiterar el cansancio ante la torpeza manifiesta de los servicios de inteligencia norteamericanos e israelíes, y ante la patológica estupidez que sufren los 180 investigadores argentinos, según Corach. Todos ellos pretenden demostrar con forceps una hipótesis ilógica e indemostrable por naturaleza, ante la mirada complaciente de un "gobierno" nativo de naturaleza cipaya, y en función de las necesidades coyunturales de Washington y Jerusalén orientadas a internacionalizar las hostilidades contra la República Islámica de Irán. Como siempre sucede con los acontecimientos políticos en estos tiempos de globalidad, lo más conveniente para comprender el comportamiento de una parte del sistema internacional -en este caso el llamado "mundo occidental"- lo mejor es estudiar las actitudes de algunos de los componentes concretos de ese mundo. El viejo método hegeliano de ver en lo particular concreto una manifestación "real" de lo universal abstracto es especialmente válido. Lo universal abstracto es la existencia de una orden, producida por el vértice de la pirámide de poder (en el "mundo occidental"), que señala la necesidad de aislar y acosar a la República Islámica de Irán. Pero esa orden es procesada y 75