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La Falsificación de la Realidad
En cuanto a las definiciones, afirma que lo sucedido en la Alemania
nacionalsocialista en torno a la "cuestión judía" no fue ciertamente un
"Holocausto", pero sí un "genocidio específico". Ni la mitofilia ni el revisionismo
"negacionista" son posiciones aceptables para Nolte. Una porque transforma en
absoluta una situación que en definitiva es "histórica", es decir, "humana". La
otra porque "niega" hechos que, según él, efectivamente ocurrieron, aunque no
en la escala que sostienen los constructores del Mito. Pero sobre todo es
inaceptable -reconoce- que sobre esa construcción se elaboren políticas en el
presente. Sin embargo, el "terrorismo" árabe tiene su parte de culpa, según
Nolte, ya que provoca "reacciones" desmedidas por parte de los judíos. En
definitiva, se debería confiar y apoyar el crecimiento político de los judíos
"racionalistas".
Traté de explicarle mi posición. La organización actual del judaísmo, jerárquica
y vertical, no acepta "críticas". Reacciona contra el crítico de manera total,
totalizadora. Por lo demás, no es posible hablar de la sociedad israelí como si
fuese un bloque. Su crisis interior es cada vez más aguda y, en este momento,
es necesario replantearse la cuestión de las "guerras civiles judías". La reciente
experiencia de la OLP de buscar el reconocimiento judío-norteamericano por
encima de todo, está conduciendo al pueblo palestino a la derrota más
dramática de su historia.
Sobre la tesis de mis últimos dos libros, preguntó:
-¿Tiene usted pruebas para afirmar que los atentados de Buenos Aires fueron
efectivamente autoatentados, y no una acción del terrorismo árabe?
Le respondí:
-No soy yo quien debe aportar las pruebas, sino la acusación judicial. Mi trabajo
es hacer un análisis político de la coyuntura argentina, y relacionarlo con el
proceso de crisis que en esos momentos se vivía dentro del Estado de Israel, que
en definitiva condujo al asesinato de Rabin y al triunfo electoral de Netanyahu.
Mi trabajo es asegurar que existe una completa continuidad racional entre todo
un conjunto muy amplio de situaciones complejas que ocurren casi
simultáneamente en puntos muy distantes del planeta. Y de asegurar además
que esa continuidad racional sea realmente explicativa, en el sentido lógico del
término, en el sentido de una lógica histórica. De hecho, quienes tenían que
aportar pruebas aún no las han aportado. Han transcurrido cinco y tres años,
respectivamente, de ambos atentados. Al día de hoy no existe ningún acusado
de estar implicado directamente en los sucesos. Existen sólo pruebas
circunstanciales insostenibles contra algunos detenidos. Pero lo que sí existe es
un estudio de ingeniería, realizado por la Academia Nacional de Ingeniería y
solicitado por la Corte Suprema de Justicia de mi país, que afirma sin
vacilaciones que la explosión de 1992 ocurrió dentro del edificio de la Embajada
de Israel. Y como usted comprenderá ningún "terrorista árabe" tiene la
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