La Falsificación de la Realidad La Falsificación de la Realidad | Page 196

La Falsificación de la Realidad constituyen el núcleo de la ideología nacional de los Estados Unidos de Norteamérica, hoy, cuyo gobierno demócrata incluye a cuatro ministros judíos en puestos de extrema relevancia - Defensa, Relaciones Internacionales, Economía y Seguridad Nacional, nada menos). En febrero de 1997 año, en una conferencia que pronuncié en Damasco, en la Unión de Escritores Árabes (UEA), señalé el hecho por el cual el nacional- judaísmo es hoy un fenómeno global, y por lo tanto, profundamente imbricado con las tendencias globalistas de la economía internacional. Lo que a su vez significa la total hegemonía de los Estados Unidos de América sobre el resto del mundo. En rigor de verdad, el nacional-judaísmo pretende convertirse en la ideología de ese proceso económico globalizador. Es decir, que aspira a ser el hecho cultural hegemónico en el "mundo occidental", en la llamada "civilización judeo- cristiana". El nacional-judaísmo es un fenómeno global, instalado en la totalidad del "mundo occidental", y no sólo en el espacio geopolítico árabe- persa-musulmán. En cada uno de los Estados y regiones culturales de "Occidente" se manifiesta de manera específica. Los sucesos que conmueven al mundo árabe-persa- musulmán (Oriente Medio+Asia Central) no son los únicos que protagonizan los judíos (Estado de Israel+Organizaciones judías internacionales) contra sociedades y pueblos no judíos, musulmanes y/o cristianos. Esas acciones del nacional-judaísmo están interrelacionadas en la escala global (aunque son predominantes en el mundo Occidental), lo que significa que no están limitadas a una región específica del planeta. Por lo tanto el combate contra las ambiciones hegemónicas e imperialistas del judaísmo contemporáneo debe ser concebido también a escala planetaria, y se debe adecuar, en cada caso, a las características específicas -políticas y culturales- de cada Estado concreto, de cada región allí donde ese combate se verifique. Tal cual lo estamos intentando hacer en el "caso español", que desde el punto de vista histórico y geopolítico representa un escenario de la máxima importancia dentro de esta dialéctica de alcance planetario. No es posible mantener ninguna esperanza razonable de vencer a las manifestaciones militares más violentas que protagoniza el nacional-judaísmo en el mundo árabe-musulmán sin antes fracturar la ideología global del nacional-judaísmo, que se está convirtiendo en el núcleo de lo que hoy es el "mundo occidental" o la cultura "judeo-cristiana". El verdadero centro de gravedad cultural del frente de combate de esta guerra global contra el nacional-judaísmo está en enfrentar esa ideología dentro del propio "Occidente", desnudando sus mitos y falsedades, y creando y 196