La educación odontológica actual 1 | Page 11

Tratamientos quirúrgicos

enas

777

Cirugía con colgajos (cirugía de reducción de las bolsas). El periodoncista realiza incisiones mínimas en la encía para levantar una sección del tejido de esta y exponer las raíces a fin de realizar un raspado y alisado radicular más efectivos. Debido a que la periodontitis causa disminución de la masa ósea, el hueso oculto se puede volver a moldear antes de que se suture el tejido de la encía nuevamente en su lugar. Una vez que te cures, será más fácil limpiar estas áreas y mantener el tejido de la encía saludable.

Injertos de tejido blando. Cuando pierdes tejido de la encía, se retrae la línea de dicho tejido. Podría ser necesario que te refuercen parte del tejido blando dañado. Normalmente, esto se hace extrayendo una pequeña cantidad de tejido de la parte superior de tu boca (paladar), o de un donante, para adherirla al sitio afectado. Esto puede ayudar a reducir la retracción de las encías, recubrir las raíces expuestas y darle una apariencia más agradable a los dientes.

Injerto óseo. Este procedimiento se realiza cuando la periodontitis ha destruido el hueso que rodea la raíz del diente. El injerto puede estar compuesto por pequeños fragmentos de tu propio hueso, o bien, el hueso puede ser sintético o donado. El injerto óseo ayuda a prevenir la pérdida del diente al sostenerlo en su lugar. También sirve como plataforma para el nuevo crecimiento del hueso natural.

Regeneración guiada del tejido. Esto permite que el hueso destruido por las bacterias vuelva a crecer. Una de las técnicas consiste en que el dentista coloque una pieza especial de tela biocompatible entre el hueso existente y tu diente. El material evita que ingrese tejido no deseado en el área de curación, lo que permite que el hueso vuelva a crecer.

Proteínas que estimulan tejidos. Otra técnica supone aplicar un gel especial a la raíz del diente enfermo. Este gel contiene las mismas proteínas que se encuentran en el esmalte de los dientes en desarrollo y estimula el crecimiento de huesos y tejidos saludables.

Injertos de tejido blando: Cuando pierdes tejido de la encía, se retrae la línea de dicho tejido. Podría ser necesario que te refuercen parte del tejido blando dañado. Normalmente, esto se hace extrayendo una pequeña cantidad de tejido de la parte superior de tu boca (paladar), o de un donante, para adherirla al sitio afectado. Esto puede ayudar a reducir la retracción de las encías, recubrir las raíces expuestas y darle una apariencia más agradable a los dientes.

Injerto óseo: Este procedimiento se realiza cuando la periodontitis ha destruido el hueso que rodea la raíz del diente. El injerto puede estar compuesto por pequeños fragmentos de tu propio hueso, o bien, el hueso puede ser sintético o donado. El injerto óseo ayuda a prevenir la pérdida del diente al sostenerlo en su lugar. También sirve como plataforma para el nuevo crecimiento del hueso natural.

Regeneración guiada del tejido: Esto permite que el hueso destruido por las bacterias vuelva a crecer. Una de las técnicas consiste en que el dentista coloque una pieza especial de tela biocompatible entre el hueso existente y tu diente. El material evita que ingrese tejido no deseado en el área de curación, lo que permite que el hueso vuelva a crecer.

Proteínas que estimulan tejidos: Otra técnica supone aplicar un gel especial a la raíz del diente enfermo. Este gel contiene las mismas proteínas que se encuentran en el esmalte de los dientes en desarrollo y estimula el crecimiento de huesos y tejidos saludables.

Enfermedad periodontal del diente. [alla_snesar]. Sitio web: https://bit.ly/2UJDw7M