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Estadio Latinoamericano
La pizarra eléctrica, en vez de informar, confundía, por causa de un progresivo deterioro.
Las deficiencias en la superficie del terreno no
sólo dificultaban el buen funcionamiento de
los partidos, sino que exponían a los jugadores
a accidentes. El drenaje era pésimo… En fin,
a lo largo de 40 años o más, las autoridades
deportivas asistieron impávidas al descalabro
paulatino del estadio, construido en 1946,
remodelado en la década de 1970 y desde
entonces abandonado a su suerte. Entretanto,
atletas y aficionados no dejaban de preguntarse a qué se han destinado las sustanciales
ganancias que reportan al régimen los cientos
de jugadores, técnicos, entrenadores y especialistas del béisbol contratados en el exterior.
Una posible respuesta podría derivarse de lo
afirmado públicamente por uno de los grandes
peloteros y capitanes de nuestro béisbol,
Antonio Pacheco, merecedor de títulos como
Gloria Deportiva de Cuba e Hijo Ilustre de
Santiago de Cuba, los cuales les fueron retirados abusadora y arbitrariamente por las autoridades cuando declaró al programa deportivo
“Al Duro y Sin Guante” (Radio y TV Martí):
“La pelota cubana la dirige una mafia encabezada por Antonio Castro”. Sin embargo, él no
es el único que piensa así. Otros sobresalien-

tes peloteros también lo han expresado. Y en
general lo afirma la mayoría del público
aficionado, cada vez más abierta y masivamente, precisando incluso que esta mafia
dirigida por un hijo de Fidel Castro es una
mafia blanca, aun cuando ha permitido el
acceso a muy pocos adláteres negros, traidores a su grupo socio-racial y a su pueblo. Y
como no podría ser de otra manera, es precisamente el jefe de esta mafia blanca quien
tiene a su cargo todas las negociaciones con la
MLB, tratando de que lo reconozcan como
mediador en la contratación de peloteros
cubanos. Durante meses gravitó el temor de
que los directivos de la MLB cayeran en la
tentación, dada la rica cantera que representa
el béisbol cubano, pero The New York Times
ha publicado una noticia que muy bien podría
situar a esa mafia esclavista en tres y dos, es
decir: en apuros. Los jugadores de béisbol
residentes en Cuba podrán ya firmar contratos
a título personal con clubes de Grandes Ligas.
La medida entró en vigor el 16 de marzo y se
inscribe dentro del conjunto de autorizaciones
firmadas últimamente por el presidente Obama No sólo los peloteros, sino todos los ciudadanos cubanos pueden trabajar y cobrar
directamente salarios de compañías estadou24