IDENTIDADES 1 ESPAÑOL Febrero 2017 | Page 47

en su hoja de ruta y la espera se tornaba desespero dada su lenta velocidad de traslación y el incremento constante de su potencial destructivo . Cada cubano — y en especial los orientales — prestaba atención a los boletines meteorológicos y se hizo evidente que Matthew tocaría suelo cubano en la provincia más oriental . Guantánamo seria atravesado por un ciclón de gran magnitud y todo parecía adverso para nosotros . A pesar de haberse decretado la fase de alarma ciclónica el 3 de octubre a las 9 de la mañana , en Guaso la población percibió inercia en sus dirigentes , tomó conciencia por sí misma y comenzó a gestionarse lo indispensable para enfrentar el peligro que se avecinaba . Algunos trataban de asegurar precarios tejados y otros salían en busca de comida , algo que se hacía infructuosamente a diario , pero ahora era de vida o muerte . Unos pocos talaron o podaron , con los medios a su alcance , los árboles que ofrecían algún peligro paras sus viviendas y otros se gestionaron el sitio de evacuación entre familiares y amigos , porque sabían que nada más podían hacer . En la televisión nacional cualquiera percibía que lo que ocurriría en Guantánamo no era de interés . La provincia que sería afectada directamente por el huracán se mencionaba poco o nada y , en cambio , la Ciudad Heroica ( Santiago ) se mencionaba constantemente en los espacios noticiosos . El General de Ejército Raúl Castro aparecía dando instrucciones precisas para antes , durante y después del huracán , siempre con referencia a Santiago de Cuba . ¿ Qué pasa con Guantánamo ?, se preguntaba la gente . ¿ Cómo era posible que Raúl Castro estuviese tan cerca y no mencionara a nuestra provincia en absoluto ? ¿ Qué clase de presidente es este ? Esto quizás explique el comportamiento de las autoridades locales . ¿ Que ocurría con ellas ? Pues que no se inmutaron ni crearon las brigadas para destupir tragantes — tupidos desde hace años — ni mandaron a talar un solo árbol para evitar que con su caída se dañaran las redes eléctricas , las viviendas o , peor , se perdiera una vida . Con respecto a los víveres huelgan los comentarios . Tal como reza el famoso bolero , “ el cuartico esta igualito ”. Solo Dios sabe el porqué de las cosas y Matthew se desvió para desgracia de los residentes de Maisí , Baracoa y otros poblados cercanos . Estos guantanameros , conocedores de lo que son capaces las autoridades , se gestionaron refugios por sí mismos . La gente de Maisí dieron ejemplo fehaciente : atinaron sabiamente a refugiarse en cuevas con o sin provisiones . En Baracoa fueron menos afortunados y encontraron cobija en las mejores casas vecinas , donde la concurrencia y el poco espacio obligó a estos evacuados por sí mismos a permanecer de pie durante el temporal . En Yateras , las autoridades ubicaron a los evacuados en centros educacionales , muchos de los cuales carecían de camas y alimentos porque las provisiones se almacenaban en la cabecera provincial y no fueron distribuidas con antelación , a pesar de las reiteradas alertas del Instituto de Meteorología . Es admirable ver como los medios de difusión masiva llenan espacios con noticias de subsidios a personas con pocos recursos , las rebajas del 50 % a los materiales de construcción de viviendas y los avatares de los damnificados para adquirirlos , porque no todo es color rosa . Para que se repita la historia solo se necesitará otro huracán con más o menos la misma trayectoria . Así serán arrasadas las maltrechas viviendas que hoy se erigen sobre las ya deshechas por Matthew , que a su vez estaban construidas con materiales similares a los que ahora se adquieren . Sucedió algo que todos sabemos . La
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