IDE Online Magazine Junio 207 | Page 163

Josep Roca, sommelier de El Celler de Can Roca, elegido dos veces mejor restaurante del mundo y con tres estrellas Michelin, profesa una admiración absoluta por el corcho. El prestigioso sommelier destaca las cualidades técnicas que ofrece el tapón de corcho, como flexibilidad, estanqueidad o microoxigenación, entre otros. Además de la superioridad en la evolución y conservación del caldo, alaba con especial énfasis el encanto que encierra el tapón de corcho, al que describe como “un elemento mágico, guardián de tesoros escondidos y confidente del vino que guarda”. Considerado como uno de los mejores sommeliers del mundo, Josep Roca aboga sin dudas por “tapar con sabiduría natural” y define el tapón de corcho como “el mejor cierre del mercado, patrimonio intrínseco de la cultura Mediterránea y el único capaz de transmitir paisaje y vida”.

Peter Sisseck, fundador y enólogo de la célebre Bodega Dominio de Pingus, confía en el tapón de corcho natural para el cierre de sus exclusivos vinos, laureados a nivel internacional por instituciones de la talla de Parker o el Instituto Masters of Wine. Sisseck vincula el vino de calidad con el tapón de corcho, y lo describe como “un orgullo de la bodega y parte esencial de la imagen que se transmite al consumidor”, porque, añade “muestra el cuidado y la seriedad de la bodega en la elaboración de su vino”. El creador de uno de los vinos españoles más singulares y buscados, elogia el origen natural y el carácter sostenible del corcho y su garantía en la evolución del vino en botella. Por todo ello, afirma: “El tapón de corcho es la única y mejor solución para vinos de larga crianza y, en la actualidad, no tiene competidor”.

En líneas similares, Josep Buján, director técnico de Freixenet durante 33 años, destaca la superioridad del tapón de corcho frente a los cierres alternativos, así como sus propiedades únicas, que favorecen la crianza del cava y lo convierten en el “cierre indispensable”. A los beneficios técnicos, Buján suma el valor añadido que el tapón de corcho aporta a las bodegas por su “condición de producto natural, parte de la historia de cada vino y compañero indispensable en cada botella”. El histórico enólogo, apunta que Freixenet lleva apostando durante más de 150 años por el tapón de corcho y, a día de hoy, con una producción diaria cercana al millón de botellas, “le auguramos una larga vida a un producto tan noble como el corcho”.

Josep Roca, sommelier de El Celler de Can Roca