consumidores priorizan el bienestar.
2. Consumidores en fase de entrenamiento: los niños empiezan a tomar decisiones de compra cada vez antes. Son muy influenciables por lo que ven en redes sociales.
3. Los extraordinarios: crece la demanda de productos y servicios únicos. Son productos pensados para subconjuntos atípicos: gente más alta de la media, con intolerancias alimenticias, gustos diferentes, etc. Las marcas apuestan por ellos cada vez más.
4. Compras más rápidas: los consumidores quieren lo que quieren cuando quieren. Se busca la satisfacción inmediata y la industria se adapta con servicios como la compra por Internet y el envío en pocas horas.
5. Fascinación por lo auténtico: ante el auge de las falsificaciones cada vez más conseguidas, el packaging tiene la importante misión de evitar las falsificaciones y garantizar la seguridad de los productos. Además, crece el interés por llevar una vida más natural, rechazando productos sintéticos o procesados (especialmente en lo que se refiere a gastronomía). De hecho, la palabra “auténtico” es una de las que ofrece mejores resultados a los vendedores de ebay.
6. Identidad en movimiento: la identidad está muy relacionada con el consumo, ya sea identidad de género, de raza, geográfica, etc. Los consumidores son muy sensibles a los debates sobre identidad y las marcas se suman a las tendencias globales, para intentar llegar a todo el mundo sin herir sensibilidades.
7. Personalización: el consumidor quiere ser diferente y tener un producto diferente. La personalización es una tendencia fundamental que permite a las marcas fortalecer la relación con los clientes mediante apelando a las emociones.
8. Post compra: la experiencia de compra no termina con la transacción comercial, sino que se hace un seguimiento. Además, las marcas utilizan esa información para sus estrategias de marketing.
9. Privacidad y seguridad: en un mundo cada vez más digital y con una gran exposición a través de las redes sociales, crece la preocupación por la seguridad personal y en el hogar. Las empresas tecnológicas han aprovechado el tirón y cada vez hay más aplicaciones que nos permiten vigilar nuestra casa o tener localizados a nuestros seres queridos.
10. Bienestar como símbolo de estatus: llevar una vida saludable se está convirtiendo en símbolo de estatus a medida que más consumidores optan por hacer alarde de su pasión por el bienestar con sesiones de ejercicio, alimentos con propiedades saludables o vacaciones orientadas a la salud.