semblanza
Los programas doctorales e investigación
de la FIME tienen cuatro objetivos principales:
◗ La formación de investigadores altamente calificados
con grado de Doctor.
◗ La Investigación Científica y desarrollo tecnológico de
interés a la industria local y nacional.
◗ La promoción de los grupos multidisciplinarios de investigación para la solución de problemas específicos.
◗ La promoción y esparcimiento del conocimiento científico en el campo de Ingeniería de Materiales, Eléctrica,
Sistemas y Mecánica.
En una era de racionalización, fusión de organizaciones
internacionales y globalización, la industria siderúrgica requiere una fuerza de trabajo bien educada con un conocimiento tecnológico global, que le permita mantener la
competitividad en el largo plazo. Además, es imperativo un
compromiso actual que fundamente la investigación como
plataforma para proporcionar soluciones innovadoras futuras y desarrollos tecnológicos para la industria nacional.
Los esfuerzos en este sentido se dirigieron en conjunto por
un grupo de personas visionarias integrado por el Dr. Raúl
G. Quintero Flores, el Dr. Antonio S. Pitta y el Ing. Alfonso
Morcos; quienes tuvieron el apoyo de las empresas que
ellos dirigieron en las áreas de Investigación y Desarrollo
Tecnológico: HYLSA, VITRO y CFE, respectivamente. El
equipo de trabajo fue dirigido por el entonces Director de
la FIME, el M.C.-Ing. Guadalupe E. Cedillo Garza.
Fue así como en 1986 se establecen los programas de
“Doctorado en Ingeniería Eléctrica” y “Doctorado en Ingeniería de Materiales”, después, en 1991 se crea el “Doctorado en Ingeniería de Sistemas”; los cuales fueron creados para la “formación de recursos humanos del más alto
nivel, con experiencia en la solución de problemas industriales mediante la realización de proyectos de investigación y desarrollo tecnológico; con el objetivo de disminuir
la dependencia tecnológica del exterior”.
Con los programas doctorales de la FIME se creó un Comité Doctoral (CD), integrado por directivos de desarrollo
tecnológico de las empresas HYLSA, Vitro, CFE, Fisacero, Peñoles y Galvak. Desde 1986 hasta el año 2002, la
función del CD fue dirigir la investigación de la Facultad
hacia la innovación y el desarrollo de tecnología en procesos y productos de la industria regional.
El modelo de trabajo en investigación de la FIME se basa
en equipos integrados por profesores con grado de doctor, maestros en ciencias, ingenieros, estudiantes de pregrado y postgrado, los cuales basan sus propuestas de
solución a problemas reales en la experiencia industrial y
el conocimiento adquirido en cursos y materias especializadas de postgrado mediante la docencia. Los resultados
de las investigaciones aplican e impactan directamente
en los procesos y productos de la industria, quienes retribuyen para seguir generando conocimiento, cerrando un
círculo virtuoso.
En este sentido, el proyecto Monterrey Ciudad Internacional del Conocimiento busca forjar un mejor futuro para
Nuevo León, un futuro donde el crecimiento económico
se da como resultado de la innovación, en el marco de la
alianza entre la Sociedad, las Empresas, la Academia y el
Gobierno, en una ciudad con una infraestructura social y
cultural al servicio de la ciudadanía.
Los esfuerzos en investigación de la FIME para Nuevo
León y el mundo, se ven reflejados después de 20 años
con más de 900 publicaciones nacionales e internacionales en revistas científicas especializadas, simposios,
foros y congresos en distintos países del mundo. Se han
formado 70 investigadores con grado de Doctor, más de
200 maestros en ciencias orientados a la investigación.
La contribución en desarrollo de tecnología de la FIME
se ha manifestado con la realización de más de 250
proyectos en colaboración con universidades nacionales y extranjeras, CONACyT y empresas como CEMEX,
Whirlpool, Lamosa, Nemak, HYLSA, Peñoles, Vitrocrisa,
Zincacero, CFE, Prolec, Galvak, Vitroflotado, Magnelec,
RHI, Pemex, Schweitzer Engineering Laboratories, Vitroenvases, Gamesa, entre otras.
El repunte de la industria siderúrgica a partir del año 2004,
cuando supera por primera vez, una producción mundial
de acero por arriba de los mil millones de toneladas, la
modernización de esta industria y la reactivación económica, ha requerido que la industria siderúrgica demande
profesionistas, ingenieros e investigadores especializados en este campo. Es así que los grandes consorcios
siderúrgicos de nuestra época buscan asociarse con las
universidades para motivar a m