laminación
Sobre la base de la información de la Tabla II, los rodillos
semi-HSS tienen un mejor desempeño para las características que se buscan en el laminador compacto, de altas
temperaturas y fuertes reducciones. De información de
literatura [1], para obtener un buen ángulo en la mordida es importante el disminuir la cantidad de carburos, lo
que se logra al disminuir el contenido de carbono, además
de la dureza de la superficie, en cuanto a la resistencia al
desgaste, este rodillo posee una microestructura completamente diferente de carburos primarios y secundarios de
MC y M2C y algunos de M7C3. Todos estos carburos tienen una alta dureza comparada a las de los rodillos de
alto cromo en acero o hierro.
En suma, el desgaste debido a la oxidación a alta temperatura es minimizado por la composición de la matriz,
debido a que ofrece una alta resistencia a la oxidación.
Además, por ser forjado, estos rodillos no tienen los problemas de interfase entre el núcleo y la capa de trabajo,
normalmente presentes en los rodillos doble vaciado. Este
proceso de fabricación sumado al beneficio total que se
obtiene por el tratamiento térmico de templado, lleva a un
bajo nivel de esfuerzos residuales, se ha encontrado que
la cantidad de austenita retenida es considerablemente
menor gracias a este tratamiento térmico.
2. Condición superficial observada de
los rodillos semi-HSS.
Se probó un par de rodillos, en la mayoría de sus campañas probaron tener un buen desempeño. En la Figura 1 se
muestra un par de fotografías del rodillo después de terminar una campaña de laminación observándose una excelente calidad de superficie (rodillo parte trasera Figura
1a), en la misma foto se observa un rodillo de hierro HiCr.
Éste último presentó problemas de peeling en todo el
ancho de su tabla (parte delantera Figura 1a) la Figura 1b
es un acercamiento de la superficie del rodillo semi-HSS
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