Génesis 2018 | Periódico Escolar del Instituto América del Sur Periódico Escolar del Instituto América del Sur | Page 36

Feiurinha

Hace mucho tiempo, había nacido una niña muy, pero muy linda llamada Feiurinha que era la hija de un rey de Ispinal, un pueblo grande, enorme y pacífico. Había parte noble y pobre. Un día Feiurinha se enojó con su papá y fue a la parte pobre. Se encontró con un muchacho lindo, pobre y musculoso. Feiurinha se enamoró completamente y le dijo:

-¿Cómo te llamás?

-Me llamo Julián -dijo él.

Julián y Feiurinha se enamoraron, fueron al lago y cabalgaron. Cuando se hizo la noche Feiurinha volvió al palacio y fue a dormir. Al día siguiente, Julián y Feiurinha fueron a pasear y Julián se arrodilló, sacó un anillo de su bolsillo y le dijo:

-Feiurinha, ¿te casarías conmigo?

-¡Claro que sí! ¡Volveré al palacio y le contaré a mi padre! -dijo Feiurinha.

Feiurinha corrió al palacio y le dijo a su papá que se enamoró de un muchacho rico y bueno, un príncipe llamado Julián del Bordis y el papá le dijo:

-Al fin te enamoras de alguien decente, quiero verlo mañana a las 12:00pm para almorzar juntos- dijo el papá.

- Ya me pidió casamiento -dijo la muchacha.

- Entonces, si todo sale bien, te casarás este miércoles, pero si sale mal nunca verás a ese muchacho- comentó el padre.

Feiurinha fue a su habitación pensando qué iba a hacer porque le mintió a su papá. Cuando llegó el día, la muchacha se despertó a las 9:00am y fue a la casa de Julián y le contó lo que había pasado. Julián se enojó pero era tarde, el padre vio a un hombre feo, débil y con mal olor. Retó mucho a su hija y la llevó al palacio. Esa noche la princesa lloró, se escapó y fue con Julián. Se fueron a recorrer el mundo. Llegaron primero a Grecia y se casaron. El papá se enojó muchísimo pero entendió que su hija era más grande y tenía que recorrer el mundo y ser feliz.

Olivia Opacak

La historia de Feiurinha

Había una vez una princesa muy linda llamada Feiurinha. Seguro se preguntarán por qué ese nombre. Bueno, es que los papás eran muy malos y la odiaban. Los papás nunca dejaban que Feiurinha saliera de su cuarto, pero ella era muy aventurera para entenderlo.

Todas las mañanas Feiurinha miraba por la ventana y veía el bosque oscuro con muchos árboles grandes y animales muy extraños. Cuenta la leyenda que todos los que entraban a ese bosque salían sin vida, pero eso solo despierta las ganas de entrar ahí.

Un día Feiurinha abrió la ventana y se tiró por una tiroleza que llegaba hasta la reja del palacio. Se puso la capucha y se fue hasta el bosque, y entonces... ¡Boom! Se chocó con una rama de un árbol y quedó inconsciente.

Cuando se depertó empezó a oír sonidos muy raros y a ver luces parpadeantes. Parecía que la estaban mirando. Feiuirinha se asustó y empezó a ir para atrás. De pronto chocó contra una ancianita que parecía muy amable aunque era una bruja. La bruja la invitó a comer a su casa. Le empezó a dar muchos pasteles (porque era pastelera).

A la mañana a Feiurinha le dolía mucho la panza y entonces la bruja le dijo:

-Comé más pasteles.

La niña se asustó y corrió. La casa estaba embrujada y las puertas se cerraron. La bruja comenzó a acercarse, Feiurinha cerró los ojos y cuando los abrió estaba en su casa. Bajó las escaleras y los papás estaban desayunando. Se dio cuenta de que todo había sido un sueño, pues ella era una niña que vivía feliz con su familia. Su nombre real era Florina.

Belen Meneses

FEIURINHA

LA HISTORIA DE FEIURINHA