GORABILBAOBASKET
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En la penúltima jornada
de la liga regular el Bilbao
Basket viajaba a la cancha del Iberostar
Tenerife con un doble objetivo: sacar
de la ecuación de la pelea por los playoff a los tinerfeños y tratar de aprovecha un pinchazo de sus predecesores
(Murcia y especialmente Fuenlabrada)
para meterse de lleno en la pelea por
las ocho primeras plazas y depender
de si mismo en la última jornada. Y ello
pasaba por lograr la victoria en cancha
canaria. Tras un comienzo irregular de
los bilbainos, estos lograrían adelantar
a su rival (19-25) mediado el segundo
cuarto, pero los entrenados por Txus
Vidorreta no estaban dispuestos a dejar
escapar sus opciones y se metieron de
nuevo en la pelea. El choque continuaría por parámetros de igualdad, con un
interesante mano a mano entre los dos
“cincos” rivales (Sekulic 15p., Begic 11p.,
3tp.) hasta que en los últimos minutos,
pese al acierto de Marko Todorovic y Raul
López, los entrenados por Txus Vidorreta
lograrían decantar la victoria a su favor
(77-71).
Llegaba el Bilbao Basket,
tras su derrota en Tenerife,
al último acto de la primera fase liguera
sin depender de si mismo para su continuidad en la competición. Las cuentas estaban claras. Necesitaba que el
Tenerife no sumara un triunfo en si
visita ante un Barcelona que se jugaba
el primer puesto, que el Fuenlabrada, al
que se tenía ganado el basketaverage,
perdiera frente a un Murcia que jugaba
por la séptima plaza precisamente ante
los madrileños, y por último, vencer al
CAI Zaragoza en Miribilla. Muchos condicionantes, pero a medida que comenzaron todos los encuentros, las noticias
desde las diferentes canchas en que
“jugaba” el conjunto bilbaíno eran positivas. El Tenerife, casi desde el inicio