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que resultarían a todas luces insuficientes para cumplir con los pagos acordados con jugadores, empleados y proveedores. Los altos contratos firmados con
los jugadores, además de otras partidas
no convenientemente aclaradas trajeron consigo primero una reducción
drástica de presupuesto, y posteriormente la amenaza de plante por parte
de una plantilla que veía como pasaban
los meses y no cobraban lo acordado.
Sumido en una grave crisis institucional y económica, el equipo apostó por
una reducción drástica de presupuesto.
Abandonan el club Zisis, Hamilton,
Rakovic, Vasileiadis y Moerman, además
del propio entrenador Katsikaris, sustiuyéndolos por elementos menos conocidos y de menor caché como Dairis
Bertans, Antanas Kavaliauskas, Jackie
Carmichael o Zoran Vrkic, y encargandole la dirección técnica a un hombre de
la casa como Rafa Pueyo, eterno entrenador ayudante de Txus Vidorreta y
depúes el propio Fotis Katsikaris. Volvería
también al equipo ocho años después
Germán Gabriel y posteriormente Damir
Markota en sustitución de Carmichael,
quien nunca llegó a dar lo que se esperaba de él.
Al comienzo de la temporada, el Bilbao
Basket afrontaba dos importantes citas.
La primera, la Supercopa en Vitoria, en la
cual cayeron en semifinales ante el Real
Madrid, y la segunda, un partido en el
Bizkaia Arena ante Philadelphia 76ers.
En este histórico enfrentamiento, el
conjunto del botxo se mantuvo dentro
del partido en todo momento y llegó a
los últimos segundos conserias opciones de ganar, cuando un triple de Raul
López (quien atsoró once puntos y
cinco asistencias) no quiso entrar y dejó
el marcador final en 104-1