Generando Arte. La Revista nº 2. Junio 2015 | Page 36

“El arte degenerado” en femenino Por Aurora Piñeiro E n el año 2012, Florian Illies publicó su libro 1913 Un año hace cien años. En él describe la Europa previa a la Gran Guerra ocupándose del efervescente ambiente cultural que se había generado desde principios del siglo XX. Alemania era uno de los focos más importantes y Berlín una de las ciudades más vanguardistas del momento. Entre los múltiples personajes que desfilan por la obra, deseo destacar a dos mujeres, seguramente hoy poco conocidas, que participaron activamente en el ambiente prebélico: Elsa Lasker.Schüller (1869-1945) y Lou Albert Lasard (18851969). Las dos tienen en común ser alemanas, hijas de banqueros judíos alemanes, exquisitamente educadas y con una mente inquieta que las permitió formar parte de la vanguardia del momento Elsa fue el centro de la bohemia berlinesa cuando al casarse con el Dr. Lasker se trasladó a Berlín. Allí se introdujo en los círculos artísticos tanto literarios como 36 pictóricos. En 1902 publicó el que seguramente fue su primer libro de poemas, Styx, y siguió su producción siendo premiada en diversas ocasiones hasta que su obra fue prohibida por el Nacionalsocialismo en 1933 y se vio obligada a huir. Se estableció en Zurich, desde donde en tres ocasiones viajó a Palestina, la última para no volver, muriendo en Jerusalén. Si su faceta más conocida es la de escritora de poemas calificados de expresionistas con gran influencia oriental que reflejan el amor, la lejanía, la separación y la muerte, aquí tenemos que hacer hincapié en su trabajo como ilustradora. Ella mantuvo relación con el grupo Expresionista y especialmente con Franz Marc, que la ayudó a seguir adelante cuando divorciada pasó por una difícil situación económica teniendo que mantener a su hijo. Marc murió en la Guerra y ella le dedicó El Malik, publicado en 1919, un conjunto de cartas ficticias remitidas al pintor. Su orientalismo queda patente en los dibujos conservados. En ellos, ella misma puede aparecer como protagonista, generalmente vestida de hombre. Lou Albert-Lasard se formó en Munich en el momento en que aquella ciudad era lugar de residencia de futuros artistas que adquirirían fama internacional, por ejemplo Kandinsky o Paul Klee. Es la