F1Gossip Magazine Número 13 | Page 84

reportaje forma rápida, es esperable que se puedan cometer errores. El intentar ser eficientes para ser rápidos puede llevar a cortar esquinas, lo cual puede tener consecuencias desastrosas. Ejemplos como el otro día, cuando Mark Webber marcó su mejor vuelta con el SC en pista, muestran el peligro al que se pueden enfrentar los comisarios. Hemos visto a ALO en Brasil 2003 pasar olímpicamente de banderas Por ello, me molesta amarillas doblemente cuando oigo a comen- ondeadas, Charles Pic taristas (que, obvia- en Singapur el año pamente, jamás han es- sado ignoró una bantado en una curva), o a dera roja. El comisario “aficionados de salón” que está en pista confía criticar la tardanza de en que los pilotos ralenlos comisarios de pis- ticen de forma acorde ta: la recuperación de cuando la sesión/carreun coche, o limpieza ra está neutralizada, y tras un accidente, pue- que éstos pilotos puede ser rápida... o no. dan ignorar las señales Es importante que ellos y que no pase nada es sepan hacer su trabajo, peligroso. pero también lo es que puedan hacerlo con se- Con respecto a lo ocuguridad. rrido en Canadá, sí se puede decir que el comisario tenía que haber sacrificado la radio, pero es fácil decirlo ahora y no cuando se está en plena carrera de F1, nada menos. La seguridad de todos los implicados en una carrera de coches es responsabilidad de todos, y las actuaciones que la pongan en peligro deberían ser castigadas de forma muy seria. De otra manera, también es importante recordar que, en la mayoría de los casos, el trabajo de los oficiales es voluntario y “honorario”. Salvo los empleados de federaciones, como puedan ser los Delegados Técnicos, los oficiales involucrados no cobran un salario. Tienen sus gastos de desplazamiento y alojamiento subsanados y una dieta diaria, pero nadie saca un sueldo de ésto. Me consta, por ejemplo, que los comisarios de pista en Silverstone en 2008 recibían un bocadillo al día y 20 libras, además de tener acceso a un puesto de camping. Teniendo en cuenta que podían venir desde cualquier punto del país, es posible que esas 20 libras diarias no les diera ni para cubrir el combustible. Por tanto, yo siempre reclamo respeto para los oficiales: como se dice, somos aficionados haciendo un trabajo de profesionales, que no es fácil. La entrevista con Tamara a exclarecido mucha de las dudas que los aficionados suelen tener acerca de este gran olvidado personaje del circo de la Fórmula 1 y los deportes de motor. Los oficiales que cada fin de semana hacen posibles las carreras deberían estar mejor reconocidos y valorados. Cierto es que para ilustrar este reportaje han sido necesarias varias horas más que para cualquier piloto. § 84 | F1Gossip