Tal vez llegó hasta el Ágora, queriendo ser reconocido por Sócrates, pero el gran maestro lo ignoró; ignorar es una expresión violenta disimulada, sin embargo entre los dos filósofos no hubo agresión alguna, ni reclamos airados; Demócrito lo cuenta como una anécdota en su vida
Algunos no están de acuerdo con la Filosofía, como el actual Alcalde de Cartagena Manuel Vicente Duque, quien en una entrevista para un canal regional de televisión se preguntó “¿de qué le sirve a un muchacho pobre estudiar filosofía?”, tal vez, sirve para generar consciencias críticas que no sigan votando por personajes como el alcalde en cuestión, y por otros tantos.pues considero que pedir una explicación o dar un argumento es más democrático y didáctico que un “coscorrón”. También entre Profesores consideran que esas horas de Filosofía del currículo se las deberían dejar para enseñar áreas fundamentales e importantes; por lo anterior, un compañero de matemáticas de mi colegio, me abordó en un pasillo de la institución y de manera desafiante, me dijo: “para qué le enseña Filosofía a los estudiantes, si eso no sirve para nada; no les quiete el tiempo con sus lecturas y déjelos estudiar física y química que son las áreas que mayores avances científicos le han dado a la humanidad”. Mi respuesta, con más sed de venganza que con actitud pacífica, fue: “pues profe, la Filosofía sirve para no lanzarle una papa-bomba, hecha en un laboratorio de química, a personas como usted”.
Prefiero un argumento, una idea o una opinión a un acto violento pues como dijo Hobbes hablando de los tiempos de guerra, que en ellos“no existe oportunidad para la industria, ya que su fruto es incierto; por consiguiente no hay cultivo de la tierra, ni navegación, ni uso de los artículos que pueden ser importados por mar, ni construcciones confortables, ni instrumentos para mover y remover las cosas que requieren mucha fuerza, ni conocimiento de la faz de la tierra ni cómputo del tiempo, ni artes, ni letras, ni sociedad; y lo que es peor de todo, existe continuo temor y peligro de muerte violenta; y la vida del hombre es solitaria, pobre, tosca, embrutecida y breve” .En conclusión, es mejor la paz a la guerra y si la Filosofía algo aporta, no habría razón para perder la oportunidad de hacerlo desde las aulas de clase.
Por: WENCITH GUZMÁN GUTIÉRREZ