ESCUELA DE DESCODIFICACIÓN BIOLÓGICA ORIGINAL 2015 2017 Vol.4 | Page 86

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Revista EDBO Descodificación Biológica Terapia & Salud

Cuando viene un paciente al que le acaban de dar la noticia de su enfermedad, tengo más recursos para tratarlo y evitar que caiga en una situación de miedo o estrés. Parece ser que los científicos relacionan el estrés, a través de la hiperactivacion del SNS y las hormonas del estrés con mayor riesgo de metástasis.

Y con pacientes en fase terminal, ¿cómo actúas?

Trato de ver qué es lo que no han podido resolver. En función de ello, trabajo para aligerar culpas y liberar ciertas cargas que están ahí dentro retenidas. Es un acompañamiento distinto. Pero en ningún momento tiro la toalla. Siempre estoy enfocado a mejorar. Mi trabajo es aportar recursos para que la persona se pueda sentir mejor. Y esto es posible en cualquier fase de la enfermedad. Hay vida hasta el momento de morir, y todo enriquece.

¿Qué resultados aprecia?

La tónica general es la aceptación de la terapia. Los pacientes salen de consulta con ganas de ejercer ese cambio en su vida y de sobreponerse a sus miedos. En estos casos, el trabajo se ve muy recompensado.

Pero también habrá casos que le hayan dejado mal sabor de boca…

Sí, hay gente que no quiere cambiar, que te dice: yo soy así y no voy a cambiar porque, de lo contrario, no sería yo. En estos casos, ves que la terapia no va a avanzar.

Pero, yo creo que si te ha salido un stop en el camino, ¿por qué vas a continuar igual? El stop te dice que mires hacia atrás, que aprendas de lo que has vivido y que te reinventes. Ahí es donde hay que desprenderse de ciertas maneras de ser o pensar.

Cuéntanos un caso de éxito, alguna historia que te haya marcado.

Hay muchas, algunas son casi mágicas. Es realmente impresionante. Vienen pacientes que ya han ido a varios especialistas, al traumatólogo, al osteópata… porque tienen un dolor permanente, por ejemplo, lumbar. Y de repente, se liberan de él en una sesión. ¡En una sesión! El paciente luego te llama y te dice, “no sé qué me has hecho, no lo entiendo. Ahora estoy bien”.

Y la familia, ¿cómo interviene durante el proceso?

La familia puede ser el entorno más sanador o el más tóxico. Por lo general, la familia encaja bien los cambios que realiza el paciente. Entiende que necesita tomar las riendas de su vida y levantar cabeza. Pero en otras ocasiones, la familia puede ser perjudicial y sus reacciones pueden interrumpir el proceso de mejora. En este espacio relacional hay que ser cauto. Son esclavitudes consentidas… no solo es responsabilidad de la familia.

¿Tu trabajo ha cambiado tu forma de entender la vida?

Siempre se producen cambios. La terapia me ha servido para hacer un trabajo personal y reconocerme a mí mismo. Cuanta más coherencia tienes tú a nivel interno, más confianza transmites a tus pacientes.

¿Qué le dirías a un profesional de la salud para recomendarle estudiar DBO?

Yo elegí aquellas terapias con las que me sentía más afín. Confío en ellas porque veo que dan resultado: se puede establecer la relación entre lo vivido y los síntomas y se pueden solucionar los conflictos mediante terapia. Es algo bastante tangible.

Creo que cuanto más flexible seas contigo mismo y más abierto estés a otros puntos de vista, más aprendizaje integrarás y compartirás con tus pacientes. Será más enriquecedor.

"Mi trabajo es aportar recursos para que la persona se pueda sentir mejor. Y esto es posible en cualquier fase de la enfermedad. Hay vida hasta el momento de morir, y todo enriquece."