Enroque San Luis Revista Digital de Ajedrez - 7º Edición | Page 23

vierta en una especie de obsesión que pocas personas pueden llegar a entender. Creo que cuando inauguraron el Campus sabía que se- ría así, que esa “perfección” tendría un precio. Estoy convencida que vale la pena, primero porque me entusiasmaba el hecho de conse- guir resultados, pero ahora porque me motiva más saber que ser parte de una rutina discipli- nada, de un equipo profesional, de usar mi día exactamente como quería, es una mismísima bendición en sí. Solo formar parte de este pro- ceso ya me hace feliz. Por supuesto que hay cosas que a uno le gustan más y otras que a uno le gustan menos, pero siempre -siempre- hay un precio que pagar por lo que uno quie- re. Es como un equilibrio natural del mundo. Volviendo a mi adolescencia, reconsidero que si no hubiese nacido en La Rioja, no hubiese desarrollado el amor a la naturaleza, a las cosas simples. Nunca me hubiera despertado la pa- sión por el ajedrez y por una vida llena de de- safíos sin grandes ambiciones materiales pero repleta de metas de superación. Eso hizo que cuando a los 17 años me mudé a San Luis pu- diese valorar el doble todas las oportunidades que esta hermosa provincia me ofreció y por lo cual voy a estar eternamente agradecida. También pienso en la excelente familia que me tocó, gracias a los valores de justicia, prudencia y sobre todo fortaleza, nunca hubiese podido soportar el rumbo que elegí. ¡Ni siquiera hu- biese tenido el coraje de elegir lo que quería para mi vida! Así que agradezco todo el amor que recibí de ellos, pero sobre todo su rectitud de pensamiento que forjó en mí una especie de cimientos de valores, que aplican sin impor- tar si mi elección de vida fuese o no tradicional. Para concluir les cuento que me encuentro re- dactando esta nota mientras estoy disputando en Villa Martelli, Buenos Aires, el torneo “Zonal 2.5” donde los mejores de Paraguay, Chile, Uru- guay y Argentina compiten para obtener una sola plaza en el circuito de la copa del mundo. Es un torneo interesante que por su nivel y exi- gencia seguro ayuda a progresar. En la primera ronda tuve la oportunidad de ganar una partida con muchas idas y vueltas, con imprecisiones de ambos bandos y que me recordó en parte al tema central de esta nota. Va la partida: 23