El Duende nº21 | Page 45

¿Cuándo decidiste dedicarte profesionalmente al mundo del tatuaje? En cuanto tatué por primera vez una piel humana, fue tan buena la sensación, que lo vi todo claro, entonces empecé a invertir mi tiempo y dinero en los mejores materiales para llevar a cabo mi aprendizaje en este oficio tan maravilloso. ¿Cómo empezaste? Como todos, tatuando frutas, orejas de cerdo y pieles sintéticas, después llegaron los amigos de confianza, y desde entonces no he parado ni un día. ¿Cuál fue el primer tatuaje que hiciste? La primera vez que tatué piel humana fue un repaso de un viejo tatuaje, en la pierna de mi chica, así todo quedaba en casa, jejeje... ¿Qué proceso sigues desde el momento que alguien decide ponerse en tus manos? Lo más importante es tener claro que esto no es un juego, y por mi parte, no perder el respeto que se merece cada tatuaje, por pequeño que sea. Teniendo esto claro, todo va sobre ruedas, hablamos, estudiamos la idea de cada uno y le sacamos el máximo partido posible intentando hacer de cada tatuaje, un tatuaje único. ¿Has hecho algún tatuaje que tenga detrás una historia que merezca ser contada? Todos los tatuajes tienen una historia detrás, pero últimamente he