excesivo calor, el exceso de trabajo como su defecto,
igual que con estos ejemplos se podría considerar para
casi todo. Sin embargo, no quiero decir con esto que
una actitud moderada o intermedia siempre es la so-
lución a los problemas, pues todo tiene sus excep-
ciones y cuando un problema es grave la solución
también tiene que serlo. La moderación es una solu-
ción genérica, pero cuando por algún motivo una
cosa se sale de su debido lugar de forma importante,
entonces la manera de recuperar el equilibrio tambien
debe ser enérgica y contundente, es decir que en este
caso la contundencia lleva al equilibrio.
EL EQUILIBRIO Y LA MORAL
Una de las características de los mundos evolucio-
nados es que en esa sociedad ya no existe la coinci-
dencia en el mismo tiempo y lugar de personas ho-
nestas y desequilibradas como existe ahora. En reali-
dad, es la ignorancia en un sentido muy amplio la
causa de esta situación, por ello, cuando la huma-
nidad asuma la importancia de erradicar los compor-
tamientos despóticos y mezquinos alcanzará una
gran armonía y tendrá paz. Cuando digo causas no
me refiero a desequilibrios de salud necesariamente
sino a desequilibrios en la conducta moral causados
por la ignorancia sobre cómo encontrar la mejor
forma de vivir. Ninguna sociedad puede considerarse
evolucionada si no afronta el remedio a los desequi-
librios tanto en lo que se refiere a la erradicación