por ejemplo los integristas islámicos, que quieren en-
tregar el poder político a los religiosos para crear una
dictadura dirigida por ellos. También los Testigos de
Jehová, los Amish o los Judíos extremistas. Estas or-
ganizaciones están dirigidas por cúpulas formadas
por un reducido número de personas que de forma
dictatorial pretenden condicionar la vida de sus se-
guidores, a ellos no les preocupa hacer el bien, solo
les interesa ejercer el poder manteniendo cos-
tumbres atrasadas y negando a sus seguidores el de-
recho a la libertad de pensamiento o acción.
También son falsos profetas muchos de los escri-
tores de lo paranormal o del espiritualismo, pues fin-
gen estar en contacto con entidades superiores o ex-
traterrestres sin ser cierto, provocan con ello el des-
crédito de los que dicen la verdad, ellos no tienen el
valor de defender sus ideas abiertamente dejando al
lector la posibilidad de opinar y por ello les mienten
sobre el supuesto contacto, pero esos falsos contacta-
dos son fáciles de reconocer porque solo saben decir
las palabras amor, fraternidad, fraternidad y amor, lle-
nan los libros con infinidad de palabras que en realidad
no significan nada, pues nunca condenan los males de
la tierra, nunca ponen en evidencia a los corruptos y
a los que tratan de hacer el mal en este mundo, porque
su verdadero interés es el protagonismo y el lucro eco-
nómico.
También existen los que usan la táctica opuesta
mostrando a los extraterrestres como seres demonía-
cos aliados con los gobiernos de la tierra, con este mé-