El camino hacia la nueva era | Page 46

giones no sirven para nada pues están llenas de su- persticiones y creencias erróneas, esto en parte es cierto, pero deberían ser un poco más humildes y darse cuenta de que muchas de las creencias conside- radas ahora como inmutables dentro de unos años serán consideradas como tonterías propias de una so- ciedad atrasada. Esto es así, porque muchas de las co- sas en las que creemos no están suficientemente de- mostradas y nuestro orden de valores está solo par- cialmente basado en la verdad, y si esos que se consi- deran científicos materialistas pudieran viajar al futu- ro y volver la vista atrás se avergonzarían al ver que muchas de sus ideas supuestamente en consonancia con la ciencia son erróneas. Por ello, al analizar las creencias del pasado lo co- rrecto es comprender que quienes las crearon no en- contraron otra forma mejor de contar aquello que creían y quizás lo que sentían era cierto, pero el pro- blema era encontrar el modo de contarlo de la forma más acertada. Podría decirse que la correcta definición del cielo, al que uno va después de morir, sería en realidad el mundo una vez haya terminado su proceso de evolu- ción y alcance un alto nivel de paz y felicidad. En las distintas religiones se plantea esto como el premio a una vida justa, en realidad todas las personas alcanza- ran ese mundo perfecto mediante la superación indi- vidual de sus propios errores, que a su vez dará lugar a la evolución del mundo. Todos llegaran a ello pero no mediante la resurrección del cuerpo lo cual no tiene 46