EL BOLCHEVISMO DE MOISÉS A LENIN - DITRICH ECKART EL BOLCHEVISMO DE MOISÉS A LENIN - DITRICH ECKART | Page 33

mangoneo. Por dos veces el patriarca de la tribu Abraham vende a un harén a su mujer Sara, haciéndola pasar por su hermana; y por dos veces le sale redondo el negocio, gracias a la ayuda de Jehová. En cuanto a los profetas, aúllan venganza igual que las bestias salvajes en la jaula. Sus profecías se han ido al cuerno de forma notoria hasta la última letra. Lo único que nos queda ahora son los salmistas. Que también resultan una bonita lectura, si uno se toma la molestia de mirar detrás de sus edulcoradas expresiones. Esto es todo lo que hay que agradecerle a nuestros protestantes. El protestante Schopenhauer les llama personas íntegras, si bien de chato sectarismo (98) . Y la Biblia no es ningún libro de cocina (para andar trajinando en ella)». «El espíritu de Lutero» –repliqué yo-«parece haber quedado totalmente en suspenso entre ellos. En la cuestión suprema, la cuestión judía, lo cubren de un silencio mortal o buscan atenuarlo. Hasta los propios mejor pensados de entre sus teólogos, tal como el profesor Walter (99) , llaman a la posición de Lutero respecto de los judíos “tan chocante que no sólo debió provocar el asombro estupefacto de los cristianos, sino una gran indignación de los judíos”. A aquellos cristianos que se quedaron estupefactos de asombro no tendría por qué haberles sucedido así si no se hubieran dejado pasmar previamente por los judíos; y la gran indignación de los hebreos a nosotros no nos preocupa ni un ápice. ¿Dónde se hace notar esa indignación, a todo esto? Hasta la fecha Israel no ha dicho ni pío al respecto. No en vano, en su calidad de adversario de Roma, le ponen por las nubes. Lutero, carísimo varón, comienza Heinrich Heine (100) un himno encomiástico en toda regla dedicado al reformador». «Él sabe bien la causa» –dijo Hitler con sorna. «Todos los judíos saben por qué celebran a Lutero, sin reparar en el menor indicio de su antisemitismo. ¡Sin haberlo querido, les prestó grandes servicios, y de qué manera! Cuanto más exaltan su autoridad, menos se percata el mundo de ese error que cometió. Si, les resulta amargo que luego renegara de ellos como si se tratase de la peste. ¿Pero, a fin de cuentas, quién repara en ello?». «El judío Goldmann» –intercalé en la conversación- «lo expresó de forma rotunda: “Lutero ha hecho que el Antiguo Testamento vuelva a ser objeto de reverencia” (101) . «En lugar de objeto de irreverencia» –fue la respuesta de Hitler. «Desde mi punto de vista, su traducción ya habrá podido ser beneficiosa para el idioma, pero ha perjudicado a base de bien la facultad de juicio alemana. ¡Por el Dios de los Cielos, vaya un manto de gloria que cubre ahora a la Biblia de Satán! La poesía de Lutero centellea de tal manera que hasta el incesto de la hija de Lot recibe un resplandor religioso. El mandamiento de Jehová de ser fértiles y multiplicarse era tan imperativo que hasta estas dos doncellas tuvieron que plegarse a él a toda costa. Cada uno tiene que contribuir en la medida en que pueda». «Schopenhauer (102) se expresa de forma parecida« –ratifiqué yo. «Opinaba que quien quisiera entender de verdad el Antiguo Testamento debería leerlo en su traducción griega; en la que tiene un tono completamente distinto, un color completamente distinto, “¡que no tiene ni el menor atisbo de cristiano!”. Tomada en contraste con ese tono, la traducción de Lutero tiene una apariencia “piadosa”, y además a menudo resulta “incorrecta, a veces hasta de forma bien deliberada, revistiendo un tono absolutamente clerical, devoto”. Lutero se ha permitido ciertas enmiendas “que bien podrían ser denominadas falsificaciones”, y continúa por el estilo». 31