L
a serie CSF de Yamaha desapareció del catálogo de guitarras
acústicas de la marca hace aproximadamente unos 15
años, recientemente la compañía nipona ha decidido volver
a producirla, con algunas actualizaciones, volviendo a formar
parte de sus propuestas acústicas flat-top.
D
esde hace unos años las guitarras
tipo parlor están de nuevo en la
palestra por diferentes razones y las
Yamaha CSF1M y CSF3M están listas
para competir en ese campo.
Antes que nada debemos comentar
que son guitarras con un pvp de poco
más de 500 euros, lo que quiere decir
que van dirigidas a un segmento de
mercado altamente competitivo y
donde no es sencillo funcionar bien,
para ello, de base hay que tener un
buen producto, una buena guitarra y
no solo en cuanto a especificaciones
también los acabados deben ser
correctos y por encima de todo sonar
bien.
Vamos a analizar la Yamaha CSF3M,
una guitarra de cuerpo parlor que
recordemos en un principio estaban
pensadas para la música de salón,
aunque fueron adoptadas para la
música rural y popularizadas por
los intérpretes de blues y folk. Esta
popularidad comenzó a disminuir en
la década de los 50 hasta ser casi
residuales y es a partir del nuevo
milenio cuando han comenzado a
recuperar su posicionamiento y han
vuelto a reivindicarse por la mayoría
de marcas que operan en el mercado
de las guitarras acústicas.
CONSTRUCCIÓN
De manera general, el cuerpo de
tamaño reducido determina unas
características
muy
concretas
pero podemos afirmar que suelen
ser guitarras cómodas y blanditas