En ese tiempo tuve experiencias
musicales esporádicas aquí. Tal
y como es L.A., cada experiencia
musical puede ser muy diferente. En
ocasiones, ¡radicalmente opuestas!
Hay de todo, y mucho. Posteriormente
decidí trasladarme aquí, al menos por
unos años. Y aquí sigo.
Ya llevas años instalado allí de forma
continuada… ¿Cómo se consigue
entrar en ese circuito freelancer tan
lleno de buenos músicos? ¿Es algo
que va más allá de las habilidades
como guitarrista o productor?
No diría que estoy en el circuito de
freelancer, aún. Requiere mucho
tiempo poder considerarse establecido
en él. De hecho el circuito freelancer
hoy día es bastante diferente a lo que
yo observé cuando visite LA en la
época 2006 – 2010. Noté un cambio
en la dirección de esos músicos que
siempre he admirado y permanecí
atento a ello.
Evidentemente, debido a las redes
sociales, todo lo que implica (lo que
llaman aquí) “networking” está más
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Cutaway Magazine /68
presente que nunca. Y se le da, en
general, una importancia equivalente
al cultivar el ser buen músico.
Yo siempre he creído en hacer un buen
trabajo, el mejor que puedas en cada
momento, en cada pequeño peldaño
que tu vida musical te propone y
con mucha paciencia, el tiempo te
regala grandes experiencias. Nada,
que merezca la pena, es rápido en el
mundo musical, creo.
Sigo pensando lo mismo que pensaba
en España y lo aplico aquí de la
misma forma. Hablo con muchos
compañeros a los que admiro como
músicos y coinciden en ello. Si te
respondo de forma más directa, diría
que observando lo que hacen los
músicos de los que te quieres rodear,
a los que admiras, por lo que hacen,
reflexionando el porqué de que lo
hacen y analizando el resultado que
obtienen a la vez que descubriendo si
es el mismo camino que crees correcto
para ti. Eso sí, hay que trabajar, y duro,
a diario. Constantemente. Aquí toda
va más rápido que iba en España. Al
menos, esa es mi experiencia.
Tocar, arreglar, componer, producir…
¿Cuál es tu tarea favorita?
No podría decidir. Lo que realmente
me atrae de esta profesión es hacer
esas 4 acciones que mencionas, a
la vez y a tiempo real. Todo se basa
en la capacidad de escuchar lo que
está pasando a tu alrededor. Filtrarlo,
procesarlo y responder. Eso hace
única esta actividad, cada vez que te
subes a un escenario o entras a un
estudio.
En mi caso, esa es la fuente de
motivación. Siempre toco la guitarra
intentado combinar lo que Pablo,
como guitarrista haría y lo que Pablo,
como audiofilo, quisiera escuchar.
Es difícil, pero ese es mi objetivo.
Disfrutar como interprete y receptor a
partes iguales. No es fácil, pero ese
intento mantiene la llama viva.
¿En qué estás trabajando en estos
momentos? ¿Cómo es un día de
trabajo para ti?
En estos momentos, divido mi vida en
dos facetas, de forma muy consciente.
La de músico profesional y la de
estudiante. Me levanto muy temprano
para ir a la universidad. Vuelvo a casa
a mediodía, usualmente y desarrollo
todo lo que el Pablo músico profesional
necesita hacer.
Dedico mucho tiempo también (todo
el que puedo) a estudiar guitarra y
practicar. Pero no solo hago esto.
Justo en estas semanas he estado
estudiando y comentando posibles
contratos discográficos (ofrecidos)
con un artista con el que colaboro.
No es una actividad muy “musical”,
pero uno no es consciente de lo que
puede ayudar aprender sobre esos
temas. Hace que profesionalmente,
como músico, puedas entender mejor
que es lo que se te pide y en qué
condiciones, a la vez que mirar a los
ojos a la otra persona que participa
del contrato y hacerle saber tu opinión
o modificaciones. Ambos entendiendo
perfectamente de lo que se habla.
Tuve la suerte de estudiar Music
Business, por unos meses, aquí en
LA., con un profesor que ha sido A&R
tanto en Europa como en USA y no