Cutaway Guitar Magazine CUTAWAY 66 | Page 35

En resumen todo esto se puede ver de la siguiente manera: en cada sala sonaremos diferente y dependiendo de donde coloquemos nuestro altavoz este quedará "ecualizado" de distintas formas; salas grandes aportan "sustain", pero si son excesivamente grandes y/o las superficies son muy reflectantes, va a ser muy difícil controlar el sonido en esos ambientes. CONSEJOS PRÁCTICOS Después de presentar este complejo mundo... ¿existe alguna solución sencilla que nos pueda ayudar? Pues la respuesta es Sí. Lo primero, y posiblemente lo más efectivo que podemos hacer es po- ner alfombras en tu local de ensayo. Ésto puede solucionar problemas con vecinos que se quejan del ruido de la batería, ya que al evitar el contacto di- recto del bombo con el suelo reducirá notablemente el ruido transmitido. Cuanto más gordas y grandes sean siempre mejor, eso normalmente so- luciona muchos problemas con salas que tienen un sonido demasiado es- tridente. Otra cosa a tener en cuenta es evitar paredes lisas, especialmente si el local es grande. Podéis colocar objetos de distintos tamaños y formas, como pueden ser desde vuestras guitarras de repuesto colgadas por la pared o algunas cajas llenas de trastos. Esto podrá también ayudar a mejorar la claridad, consiguiendo escuchar un sonido más parecido al que realmente está saliendo de vuestros altavoces. Es importante intentar mejorar el local de ensayo pero no debemos olvidarnos de detalles críticos como la colocación de los altavoces. Pegándolos a la pared podemos tener un refuerzo de volumen, que quizá sea beneficioso para nosotros. Pero lo que tenemos que evitar a toda costa es colocar altavoces en las esquinas de la sala. En ese caso la "ecualización" introducida por la sala es mucho más agresiva, consiguiendo modificar nuestro sonido radicalmente. A pesar de ello, es una práctica común para conseguir aún mayor refuerzo de altavoces con limitada potencia, pero si lo que buscáis es que vuestro local afecte lo menos posible, evitar las esquinas. LEYENDAS URBANAS: LAS HUEVERAS Relacionado con el tema de posibles mejoras para locales de ensayo es común que salte la duda, ¿y qué pasa si cubrimos las paredes con un montón de hueveras? Hay bastante controversia en el asunto, pero muchas veces se ha vendido como una solución sencilla y que ayudaba no sólo a mejorar el sonido dentro del local sino también al "aislamiento" de la sala para que la gente no escuche tanto ruido fuera. Pues todo esto no es más que lo que el título indica: una leyenda urbana. Hace unos años que yo también me preguntaba de que manera afectaría poner hueveras en las paredes y me decidí a hacer un experimento con un amigo en un laboratorio de la universidad preparado para este tipo de ensayos (una cámara anecoica). Los resultados fueron incluso más sorprendentes de lo esperado, las hueveras apenas modificaban el sonido, era tan débil el efecto que para el oído humano podía considerarse imperceptible. Por lo tanto, pegar un montón de hueveras por las paredes y techo consigue el mismo efecto acústico que llenar el local de posters, NINGUNO. CURIOSIDADES No es la primera vez que escucho el caso de gente que ensaya en un bajo y tienen problemas con los vecinos de pisos que no son los contiguos a ellos. Y es normal preguntarse, ¿por qué mi vecino del quinto se queja y los del primero y segundo no? ¿Nos están intentando hacer la vida imposible porque no les gusta nuestra música? Bien es cierto que los del quinto os tengan mal vistos es una posibilidad, pero no siempre es el caso. Debido a la estructura del edificio en sí puede que se produzca un efecto amplificador en los pisos intermedios, aumentando el ruido en ciertas zonas altas alejadas del bajo donde está situado el local. Por ello, es posible que tu vecino del quinto este soportando el doble de ruido que los del primero. Un problema similar sucede a menudo con el ruido del metro, las vibraciones Trucos y ajustes 35