Cutaway Guitar Magazine BAJOS Y BAJISTAS 38 | Page 24

Se aprecia en tu forma de tocar tu influencia del funk, el rock y el r&b ¿Cuáles son tus bajistas de referencia y las influencias musicales que te han llevado a tu actual sonido? Bueno, yo en realidad soy un popero jajaja, pero sí que me gustan muchísimo esos estilos también. Mi primer gran referente fue Flea, de los Red Hot Chili Peppers. De él he sacado muchísimas cosas, creo que se ven reflejadas en mi sonido y mi manera de tocar. Otras grandes influencias son Pino Palladino, Paul McCartney, Marcus Miller, Victor Wooten, Gary Willis, Pepe Bao, Bernard Edwards, Nathan East, Stuart Zender o James Jamerson. A todos ellos los he estudiado en profundidad y me han marcado de una forma u otra. Estudiaste con Gary Willis, has colaborado en infinidad de clinics con bajistas del calibre de Abraham Laboriel ¿Quién te ha sorprendido o te ha aportado más? Pues sí, tuve la suerte de tener a Gary como profesor durante 4 años. Con él aprendí infinidad de cosas, pulí mi técnica, amplié mis conocimientos de armonía e improvisación, etc. Gary es como un libro abierto, podría hacer clases con él 20 años más y creo que nunca dejaría de aprender. Tocar con Abraham Laboriel fue una de las experiencias más bonitas de mi trayectoria. Me hizo sentir super cómodo en el escenario y es un derroche de musicalidad pero lo que más me sorprendió es la persona que hay detrás de todo este talento. Abe es sin duda una de las personas más cariñosas y encantadoras que jamás he conocido. También tuve el honor de tocar junto a Stuart Zender (el primer bajista de Jamiroquai) en un B&B MAGAZINE #38 evento y me quedé alucinado porque no sabe absolutamente nada de teoría musical, ¡ni siquiera sabe dónde están las notas en el mástil! Al principio pensaba que me tomaba el pelo, pero no, era verdad! Pero luego tiene un groove y un gusto exquisitos. Esta pregunta siempre me gusta hacerla, para conocer un poco mejor el día a día de un músico profesional ¿Cómo enfocas la práctica y el estudio diario? La verdad es que no tengo una rutina concreta. Toco cuando puedo y me apetece. Por suerte, por trabajo tengo que tocar casi cada día (conciertos, grabaciones, ensayos) y eso es como un aprendizaje constante pero lo que es estudiar en serio lo hago muy poco últimamente. Cuando lo hago me puedo pasar una noche entera. Saco canciones que no me sé y que me resultan difíciles o improviso sobre armonías complicadas. También invierto algo de tiempo en ejercicios de técnica. Durante la temporada que estuviste trabajando en Burn the floor y en Rock of Ages estuviste en contacto y compartiste experiencias con músicos de muchos lugares, ¿Qué diferencias has podido encontrar entre la escena musical fuera de España y dentro? En realidad no hay mucha diferencia, todo el mundo intenta crear proyectos y lucha para que salgan adelante, y eso es igual de difícil aquí que allí, aunque muchos no lo crean. Quizá la diferencia es que los americanos e ingleses se toman la profesión de una forma más profesional en general si los comparamos con los músicos españoles. Hablo de seriedad, puntualidad y dedicación.