culdbura nº 13 Culdbura 13 | Page 55

“Mi pintura yo me atrevería a definirla como optimista. Me explico: parte de una actitud receptiva que no sería compatible ni con el inmovilismo ni con el desánimo. La euforia, como trasfondo de mi trabajo, de una u otra forma debe llegar al lienzo. Eso no me impide repre- sentar el dolor o la muerte; porque la actitud se traduce en el hecho mismo de pintar, no tanto en el carácter de lo representado. La idea de optimismo tampoco me impide admirar a pintores que, como James Ensor, están caracterizados por una visión trágica del mundo. Veo mi pintura, en fin, como un proceso con arraigo en el presente y el pasado, pero que mira, sobre todo, hacia el futuro. Mi cuadro ideal sería aquel que estuviese hecho con la ma- teria de los sueños que aún no he descubierto”. Visión sin figuras