Salto vital: creyentes y feminis-
tas. Nuevas perspectivas. XXII
Encuentro Mujeres y Teología
Cualquiera que sea la libertad por la que luchamos, debe ser una libertad basada en la
igualdad. (Judith Butler).
Asistí, en el Centro Pignatelli de Zaragoza, al XXII Encuentro Mujeres y Teología
celebrado el 27, 28 y 29 de septiembre. Convocaba la Asociación de Mujeres y Teología
Zaragoza. Una asociación que tiene 20 años de camino y experiencia acumulada. Cuando
mi amiga, la teóloga feminista, Mabel Ruiz me habló del tema, Salto Vital, pensé que
abordaban un punto de inflexión.
275 mujeres y algunos hombres estuvieron de acuerdo en escuchar y participar de
este Congreso durante dos intensas jornadas de diálogo, talleres y convivencia.
Dos intervenciones fueron las centrales: Ivone Gebara, religiosa católica, filósofa y
teóloga feminista brasileña y Yayo Herrero, antropóloga, ingeniera, profesora y activista
ecofeminista.
Las líneas principales de las nuevas perspectivas de creyentes y feministas quedaron
reflejadas en sus exposiciones.
¿De qué hablamos cuando decimos “teología feminista”?
La teología feminista plantea un desafío al entendimiento del mundo desde el patriar-
cado, el androcentrismo y el sexismo. Refiriéndose el patriarcado como a todas esas orien-
taciones masculinas de posesión y control, que ponen al varón autoritario sobre todo lo
demás en la vida (incluida la naturaleza), que está para ser conquistada.
La teología feminista elige renunciar a todos los dualismos. Rechaza la polarización
entre bien y mal porque la vida no está constituida por opuestos, construcciones humanas,
sino que es esencialmente una, y dentro de ella, se entienden mejor los opuestos como va-
lores complementarios.
Gebara lo centra con claridad conceptual en su libro Condimentos feministas a la teo-
logía.
“El feminismo en su diversidad fue y es un movimiento de “derechos humanos” y se
pauta fundamentalmente por una agenda de derechos a partir del cuerpo, como realidad
singular y plural en busca de libertad”.
“El feminismo teológico tiene una gran importancia en la transformación de las culturas,
en la medida en que libera a las mujeres de obedecer al orden establecido de ciertas creen-
cias religiosas patriarcales”.
Esta es la dirección en la que trabaja Gebara, transformación de las culturas con la
intención de liberar patrones. Teniendo muy en cuenta las estructuras profundas de las que
nos alimentamos, en este caso la cultura cristiana.