Cuadernos Médicos Sociales 2018; Vol 58 N°3 | Page 107

ORIGINALES: Experiencias de Participación 2. Aproximaciones conceptuales sobre la Participación Ciudadana en salud Tradicionalmente, para el sector salud se ha con- cebido la participación comunitaria desde el marco de la Atención Primaria para fomentar e impulsar el vínculo directo de las redes asistenciales, la pre- vención y la promoción de la salud con la comuni- dad. No obstante, más allá de esta definición, nos interesa aproximarnos al concepto a partir de su concepción como un derecho ciudadano y como una forma de incidencia en decisiones públicas. Para el Ministerio de Salud la participación ciu- dadana ha sido definida como, “la capacidad de incidir en las decisiones respecto de la salud, ya sea que se relacionen con el diseño, implementa- ción, evaluación de políticas, planes, programas y proyectos vinculados con la recuperación, rehabili- tación, prevención de enfermedades y promoción de la salud, como también, en aquellas decisiones vinculadas al uso e inversión de recursos públicos” (9). Es justamente la definición asociada al derecho de incidir en decisiones públicas las que se acerca a lo indagado en este artículo. Por un lado, la participación ciudadana asocia- da al ejercicio de derechos, implica concebir a los ciudadanos no solo como destinatarios o usuarios, sino que principalmente como interlocutores de las políticas públicas y las redes de salud; los cua- les pueden desarrollar capacidades para proponer, controlar y decidir respecto de los asuntos de in- terés público y, particularmente, de influir en la orientación de las políticas de salud, de manera de intervenir efectivamente en la causalidad de los problemas que llevan a una determinada situación de salud. Entonces, la participación ciudadana asociada al ejercicio de derechos sugiere una oportunidad para superar el tradicional enfoque de respuesta de sa- tisfacción de necesidades (enfoque asistencial) que predomina en la relación con los usuarios, amplian- do y profundizando la concepción de ciudadanía, al promover una nueva relación entre Estado y Sociedad Civil, en la cual las personas, en tanto ciu- dadanos, pasan a ser sujetos titulares de derechos exigibles. Junto con lo anterior, y en función de la inciden- cia en políticas públicas, cabe también considerar la participación ciudadana bajo el marco de los deter- minantes sociales de la salud; esto es, “las condiciones pública, Cuentas Públicas Participativas y Consultas Públicas 6 (7). En este sentido, en la dirección señalada por la Ley de participación y por el Instructivo Presidencial N°007 del año 2014 sobre Participación Ciudadana en la Gestión Pública (8), el Ministerio de Salud, en el año 2015, publicó la Norma General de Participación Ciudadana en Salud (9). Dicho ins- trumento adoptó los mecanismos señalados en la Ley de participación (10), pero también, reconoció mecanismos que son particulares del sector salud, tales como los planes comunales de salud, los diag- nósticos participativos territoriales, entre otros; y conformó un Comité Sectorial de Participación Ciudadana, cuyo propósito fue velar por el cum- plimiento de la norma, así como del seguimiento de las acciones de participación del todo el sector salud (11). Por su parte, desde la Subsecretaría de Salud Pública, los lineamientos de participación son esta- blecidos por el Departamento de Promoción de la Salud y Participación Ciudadana de la Subsecretaría de Salud Pública. Entre el año 2014 y 2017 dicho Departamento formuló el programa denomina- do Participación Social y Empoderamiento en Salud (12), el cual impulsó cuatro mecanismos de participación que se desarrollaron anualmente en todas las Seremi de Salud del país. Los Diálogos Ciudadanos, corresponden a consultas presenciales sobre una política de salud o regulación en particu- lar, orientados a la incidencia en políticas públicas. Las Escuelas de Gestores Sociales, corresponden a instancias de formación de dirigentes sociales y funcionarios de las Seremis, sobre diversas temáti- cas de salud pública. Los Foros Regionales de Salud Pública fueron espacios de coordinación intersecto- rial de carácter regional, destinados a generar estra- tegias para el abordaje de temas complejos de salud con una perspectiva de Salud en Todas las Políticas. Finalmente, se incorporó el fortalecimiento de los Consejos Asesores Regionales dependientes de las Seremi de Salud. Además, se incorporaron los Parlamentos Escolares Saludables, los cuales se definen como una comisión de participación con enfoque de derechos y carácter consultivo que se reúnen en una Asamblea Regional, en que los es- tudiantes (pre-basica y básica) discuten y aportan ideas de acciones que inciden en la construcción de entornos escolares saludables (13). 6  Es preciso marcar una diferencia con el período de gobierno de Sebastián Piñera, dado que se le restó prioridad a la participa- ción ciudadana y, en muchos casos, se redujo al acceso a la información. La excepción estuvo en casos más locales, dada la relativa autonomía de los establecimientos de salud. Si bien, la participación se reconoció en la Estrategia Nacional de Salud 2011- 2020 como un aspecto del fortalecimiento del sector salud, se tradujo en la creación de indicadores de participación para su monitoreo (22). 105 Cuad Méd Soc (Chile) 2018, 58 (3): 103-110