Cuadernos Médicos Sociales 2018; Vol 58 N°2 | Page 48

de la sociedad . Esto conlleva a un cambio de actitud que refleja posibles prejuicios , o directamente juicios de valor a la hora de atender a personas . Dentro de los prejuicios existentes encontramos : temor de seducción , higiene deficiente , entre otros ( 13 ). Existen profesionales de salud que están plenamente capacitados / as para enfrentar una entrevista con sujetos LGB . Sin embargo , no es la situación mayoritaria , dado que una gran parte de los miembros de los establecimientos de salud no recibe una adecuada formación de pregrado en lo que respecta a diversidad y sexualidad , a excepción de las que pudiesen ser más afines por su relación con salud mental u órganos genitales ( 16 ). Los profesionales que no se dedican a sexualidad propiamente tal , no cuentan con una educación satisfactoria otorgada , derivado en información limitada e imprecisa . Muchas veces no utilizan los términos adecuados y no siempre están conscientes de las necesidades de la comunidad LGB , lo que refleja una oferta insuficiente de servicios de salud para ellos ( 6,13,16 ).
Si el profesional no indaga u orienta la atención hacia estas necesidades particulares ( además de las necesidades más generales por el hecho de ser persona ), muchas veces se sesgan las recomendaciones de salud , llevando a diagnósticos incompletos y tratamientos inadecuados o innecesarios . Todo esto , sumado al funcionamiento del sistema de salud , hace difícil que se pueda lograr una atención clínica idónea .
Es importante señalar , por el contrario , que muchos / as profesionales si cuentan con las herramientas efectivas y necesarias para enfrentar una consulta o atención de personas LGB ; debido a su interés personal en informarse sobre el tema , recibiendo educación de postítulo o postgrado , cambiando paradigmas previamente asimilados .
¿ CÓMO SE PUEDEN DERRIBAR ESTAS BARRERAS MENCIONADAS ?
Lo principal es , en primera instancia , visibilizar la situación . Estas barreras existen y están sucediendo en nuestra sociedad , en los establecimientos nacionales de salud . En segundo lugar , informar . Existe información en internet sobre discriminación , sobre las comunidades LGBT , sobre las minorías en general . Como en todo orden de cosas , es de responsabilidad del lector ( en este contexto , el miembro del equipo de salud ) discernir entre la información útil y la que no lo es tanto , y dejar de lado la que no es verídica o confiable .
Durante la formación profesional de pregrado en carreras de la salud , las mallas curriculares debieran incluir más asignaturas relacionadas con la sexualidad . En los establecimientos de salud se podrían generar instancias multidisciplinarias de educación , idealmente en forma de capacitaciones por personal habilitado ; pero también realizando actividades entre los mismos miembros del equipo . A modo de ejemplo , el desarrollo de nuevos protocolos , manuales o afiches informativos pudiera ser útil e inclusivo a la vez , cumpliendo un rol de difusión . Es a su vez importante , que sean todas las personas que allí trabajen las que participen , independiente de su función específica como parte del establecimiento ( 16 ).
A nivel más global , la realización de campañas de difusión de información sobre discriminación y sexualidad a distintos niveles : junta de vecinos , comunidad , comunas , e incluso país ; con el fin de generar una conciencia colectiva sobre la importancia que tiene cambiar las conductas poco inclusivas y discriminadoras hacia la población LGBT y minorías en general .
CONCLUSIONES
Para tener una postura afirmativa acerca de diversidad sexual en salud , hay que informarse al respecto . Los / las profesionales de la salud son los que están en contacto con este tópico constantemente , al momento de atender pacientes de diversas sexualidades . Hay , entonces , responsabilidad por parte de ellos y ellas para cambiar la situación actual en relación a las barreras que tiene la comunidad LGB en el acceso a los servicios de salud de nuestro país , en cuanto son agentes de salud y , por tanto , deben promoverla mediante comunicación y educación efectiva , sin importar a quién . No basta solamente con decir que no se discrimina , si no , intervenir con actitudes positivas , respeto e inclusión para lograr un cambio favorable , en lo que respecta a la atención en salud y muchos otros aspectos .
REFERENCIAS
1 . Meyer I . Minority stress and mental health in gay men . Journal of Health and Social Behavior . 1995 , Vol . 36 , n º 1 , p . 38-56 .
2 . Gómez F , Barrientos J . Efectos del prejuicio sexual en la salud mental de gays y lesbianas en la ciudad de Antofagasta , Chile . Sexualidad , Salud y Sociedad . Revista Latinoamericana . ISSN 1984-6487 / n . 10 - abr . 2012 - pp . 100-123 .
Catalán M .
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