CRÍMENES POLACOS CONTRA ALEMANES ÉTNICOS EN POLONIA-EDICIÓN MEJORADA CRÍMENES POLACOS CONTRA LOS ALEMANES ÉTNICOS-2020 | Page 106
Después de condenar a nueve de los presos la muerte por su supuesta posesión
de armas, y Bissing, en vista de su avanzada edad, había sido condenado a di ez a ños
de prisión, los presos se despidieron el uno del otro. Albert Bissing relata al respecto:
Todos los ocho me pidieron no abandonar a sus familias y transmitirles su úl ti mo
adiós. A mi petición, rezamos junto al Padre Nuestro en voz alta. Cuando llegó el
preposito, le declaramos que estaban cometiendo una injusticia contra nosotros, al
que él respondió, sólo: "Bueno, vamos a rezar el Padre Nuestro”. Yo respondí que ya
lo habíamos rezado, pero que ciertamente no haría mal rezarlo una vez más. Lo
hicimos, y cuando el prepósito se equivocó, lo rezamos hasta el fin por sí solos.
Juretzki había sido conducido a la iglesia del internado donde recibió la Santa
Comunión. Junto al altar, aún había dicho: ¡Muero inocente, muero por mi patria
alemana!
Los ocho tuvieron que alista rse. A las 11:30 de la mañana, vió buscarlos un
destacamento de soldados. Pidieron una escolta fuerte para no sufrir aún mas los
malos tratos y las molestas de parte del pueblo. Además, los ocho pidieron buenos
tiradores. Gaumer me dijo: "¿Qué pensara mi viejo al verme llegar ahora?" Weigt
dijo: "No dejaré que me pongan a la venta en los ojos, porque los polacos son
capaces de pensar que tengo miedo de la muerte". Los asegurados con las esposas, a
los dos, los condujeron al lugar del suplicio, en el orden: Juretzki, Jeschke, Gaumer,
Weigt, Haeusler, Schulz, Lange, John. Yo y Kroehenke quisimos acompañarlos hasta la
puerta, pero no lo permitieron; nos repelieron y cerraron la puerta con llave. Un
centinela se quedó frente a nuestra puerta. Le pedí papel para escribir, me lo
negaron. Después me quedaba sentado la mesa rezando. La media hora después oí
dos disparos con poco intervalo de tiempo. El guardia, antes, nos aseguró que, en su
totalidad, no llevaría un segundo. Todos los ocho compañeros habían pasado
conmigo sus últimas horas en una tranquila admirable calma y con la misma calma se
fueron al lugar de la ejecicion ...
Fuente: WR II.
71. "Entradas", cobradas para ver cadáveres. - La colección de sellos
provocando sospechas de espionaje. Asesinato de los hermanos Alfred y
Kurt Barnicke de Posen.
Extraído de las actas de la Central de la Policía Criminal del Reich. - Comisión
Especial de Posen. - Distintivo: Tgb. V (RKPA) 1486/5. 39.
El 4 de septiembre de 1939, fueron fusilados, por soldados polacos en un pati o
del populoso Barrio obrero "Wallischei" en Posen, Alfred Barnicke, empleado
comercial de 27 años de edad, y su hermano Kurt Barnicke, ganadero, de 24 años de
edad. Los dos asesinados vivían, con su madre de 51 años de edad , en un
apartamento de la casa Wallschei, n ° 1. Eran conocidos, entre la población polaca de
su barrio, como hombres tranquilos y trabajadores. Kurt Barnicke era conocido c omo
deportista y luchador de box; entre la juventud polaca del barrio tenía el apodo de
"Leo". En la víspera del asesinato, tres muchachos del servicio civil de protección