Cinéfilo 16 - Marzo 2014 | Page 55

ENTREVISTA A ROGER KOZA PROGRAMADOR DE FICUNAM Quisiera que me cuentes, de la manera más amplia posible, cuál es para vos la tarea del programador. Habría en juego dos operaciones precisas. En general, cualquier programador está dispuesto a llevar a cabo la primera de ellas, la segunda rara vez tiene lugar. Por lo general lo que los programadores hacen es por un lado recibir películas, si es que sus festivales tienen convocatoria, y por otro van a la búsqueda de películas visitando lo que denominaría territorios de visibilidad: festivales de cine dominantes, como Cannes, Berlín, Venecia, y ahora también Locarno y Roma, y en ciertas ocasiones festivales quizá un poco más chicos como puede ser FIDMarseille, INDIE Lisboa, incluso el BAFICI. Estas son zonas de visibilidad en que las películas inmediatamente entran en la discusión de la programación internacional de cine. Entonces, en principio, hay una tarea bastante lógica que es el seguimiento de las programaciones a lo largo del año y a lo largo de los años, porque es importante comparar las distintas programaciones de un mismo festival para ver de qué manera van mutando o no, si hay coherencia, si hay evoluciones, si hay derivas en estos festivales llamémosle “madres”, con ciertas facultades para imponer una agenda del cine contemporáneo. Algunos programadores, que son minoritarios, no se sienten satisfechos con sólo ver qué se programa en estos festivales madres y limitarse a hacer una selección de la selección. Algunos programadores están a la búsqueda de películas escondidas y secretas, que a veces ni siquiera provienen de la convocatoria hipotética de sus festivales, películas que pueden representar un objeto novedoso dentro del panorama del cine contemporáneo. Ésa es una segunda línea. La zona más cercana donde esta 53