Brújula Ciudadana 95
24
A los dreamers les toca ahora volar alto y ver a México en su complejidad,
como el país maravilloso que es y la dureza de lo que también es. De la vi-
leza y la nobleza, de la tiranía y las ansias de cambio. Un país inmensamente
rico, sin ir más lejos, se trata de la 14ª economía más próspera del mundo
donde #nofaltadinerosobrancorruptos. Ese es el país del otro lado de su
frontera mental que también los necesita y al que pueden aportarle sin tener
que renunciar a su sueño personal de decidir libremente y más allá del lugar
donde nacieron, donde quieren radicar. Este sueño puede llegar algún día
pero también puede mantenerlos en el limbo infinito y valdría la pena que
consideren que tienen un país al que volver, porque eso los hará más fuertes
aún con el negociador más rudo.
Voten, dreamers, voten en México, donde muchos hemos
peleado -y mucho- para que sean reconocidos sus derechos
políticos, donde puedan mantener su ciudadanía plena y
donde -igual que en cualquier democracia- puedan soñar
el futuro. “Si no votan, no existen”, es casi un mantra del
sistema político en que crecieron. Entonces, voten.