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Libromanía
para leer
por Vivi García
P
ablo Médici (Brocha), el autor de Paloma, es
escritor, ilustrador y docente de Plástica. Y cuando
descubrí en la biblioteca de mi escuela Paloma, editado por A-Z, lo aparté para compartirlo con los chicos, aunque es un libro para todos.
Cuando llevo un libro del estante a mi escritorio, es porque ya desde la tapa algo me invitó a elegirlo; en este caso, fueron el color y el movimiento. Soy una simple lectora y, por lo tanto, me quedo en la vereda del disfrute y la emoción y desde allí me dejo seducir.
en lo que todo se puede, aunque no se pueda. El texto y la ilustración se complementan armoniosamente, como un baile en el que se danza la historia de Manu y de esa hermana pequeña y grande a la vez.
"Cuando llueve, baila con los truenos. Si no tiene viento a favor,
empieza de nuevo." ¡Qué clase me da Manu!, pienso, ideal para recordarla cuando me sienta abatida.
"Si la mira el que duda... la luna... ¿es la luna?”
Llega tarde para cenar, dice su mamá; anda distraído, dice su maestra. ¿Se le pasará a Manu su vocación de paloma?, me pregunto... Y me respondo: ojalá que
le dure toda la vida.
Paloma, un libro para compartir, para leer, para detenerse en cada color, en cada forma, en cada palabra y, al cerrar el libro, levantar vuelo siguiendo el consejo de Ray Bradbury.
La portada tiene un barrio, como el tuyo o el mío, con una luna casi perfecta, como son todas las lunas. Y en la página tres una cita de Bradbury y el complemento perfecto de una ilustración me llevaron a la página siguiente, y así hasta el final del libro.
"Como les decía, mi hermano Manu tiene vocación de paloma": así abre el juego de la ficción el autor, y en mí, lectora nocturna, aparece la ilusión del vuelo posible, del canto, de la amistad, de ese aire de infancia (“Edad de Oro”, dijera José Martí), en lo que todo se puede, aunque no se pueda.