Autarquía numero-cinco | Page 3

Carta editorial Sólo hay tres maneras de acceder a la totalidad: la pre- gunta, la paradoja, la negación y la metáfora; pues con cada una de esas formulaciones lo que se hace es abrir un nicho, una línea, no clausurar. La verdad suele exigir una conclusión definitiva, segura. El de-mente, el es- quizo (múltiple) - frénico (inteligencia), es el que busca y busca y nunca halla (nada, ¡nada!); es el que erra, naufraga, resiste. El que tropieza, cae y ríe a plena mar- cha de un destino que no planea de-velarse (“aletheia... muero de sed”). Parece que ¡no!, no hay cómo rebasar una cifra, una arbitrariedad, un acuerdo que se extiende desde dentro nosotros y decanta un mar en primavera: un verano azul. Y así se va haciendo evidente, sí, la ne- cesidad de un sol, de una cantina y un abrazo. La caída de un ser entre nosotros: habrá que danzar, “morir” 1 . Cada verdad es una isla. El mundo un archipiélago de voces. Ven, ¿sientes el viento en el rostro? ▪ Ilustración por: Bifo Revista Autarquía 1 Poesía: desdecir, de-lirar lo de-lírico. Autarquía 3