Daniel con uno de los clones de Orumba
neas súper confirmadas. Son líneas indiscuti-
das, con 3 generaciones de yeguas jugando Pa-
lermo y finales de Palermo.
Así, sumamos a nuestro plantel, por ejemplo, en
el lado de la Cumbia: una hija (Dolfina Cuarteta),
un hijo (Dolfina Popular) y un propio hermano de
Dolfina Cuartetera (Open Ballet).
No quiero dejar de mencionar en este podio de
yeguas fundadoras a la Sage. Con quien cria-
mos a través de sus clones y de su hija más im-
portante, la Ethel.
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—¿Cómo llegaste a tener la posibilidad de in-
corporar al clon de Sage, Show Me, a Doña
Sofía?
—Fue una situación muy extraña. Me habían di-
cho que varios polistas de alto renombre habían
visitado a Charlie Armstrong con el objetivo de
jugar el clon de la Sage, sin éxito. Mi amigo y
socio, Lucas Criado, me propuso ir a visitar a
Charlie y él aceptó. Creo que la química entre
ambos fue instantánea. Le propuse alquilarle los